El PP pasaba por allí

TENGO la sensación de que con el tiempo se ha convertido en un recurso muy estimable, profusamente utilizado por medio país, cuando menos, cargarle el muerto por todo y aun más al Partido Popular. Escucho a Carme Chacón, la socialista que vicepreside el Congreso de los Diputados, y critica al PNV por su manifestación en defensa de sus instituciones y por agredir a otra que es tan suya como la que defiende. Desliza Chacón que el PNV no hace sino copiar del PP en sus ataques a la justicia, hasta terminar poco menos que por exculpar a los de Ibarretxe y cargar el muerto a los populares. Una conspicua contertulia, que como buena parte de los comunicadores o profesionales madrileños que se dedican a estas cosas parecen tener el don de la ubicuidad, en una de sus apariciones aprovecha hasta cuatro o cinco veces para referir también al PP cualquiera de las críticas que formula, vengan o no a cuento. Y llega la ministra de Sanidad o anti tabaco y vuelve a repetirnos la monserga de que de las listas de espera que padecemos tiene la culpa... ¡también el PP! Como si los dos últimos años hubieran sido una nebulosa que no existiera en el calendario más que para bien y gloria del bipartito. Si este Partido Popular no existiera habría que pedir a Fraga y Aznar un esfuerzo para inventarlo. Siempre la izquierda ha lucido más habilidades que la derecha para despellejar a alguien aparentando que sólo le critica asépticamente. Y cuando la derecha ha dado un traspié, han aparecido más que los cien mil hijos de San Luis, incluso los primos, cuñados y demás familia para aprovechar el fallo y dejar recuerdo perecedero que ello. Pero lo del PP de ahora no es normal, se pasa, está ahí para todo, me temo que será verdad que alguien finalmente les acuse de matar a Manolete y habrá un pepero arrinconado que se confesará culpable. ¿Dice Mariano Rajoy que quiere viajar al centro? ¡Si hace tiempo y tiempo que está en el centro de todo, empezando por las tormentas!