DESDE LA CORTE
Último misterio: los explosivos
PARA poder seguir algunos episodios que rodean el juicio del 11-M, hay que ser licenciado en Químicas. Y después de tener ese título, hay que haber leído mucha novela para distinguir dónde empieza la ficción y dónde la realidad; dónde los intereses políticos y dónde la frialdad investigadora. Y después de todo eso, todavía quedará una duda: ¿por qué se ha tardado tres años en tener un dictamen pericial sobre los explosivos usados en la matanza? Se me dirá: porque fue ahora, y no antes, cuando lo pidió el juez. Pero yo persisto en la duda: si hubo que pedir ahora un informe pericial, es que no todo estaba claro. Estas oscuridades son la parte más endeble de todo el proceso. Y, como es la parte más endeble, se presta a toda manipulación. Como todo es muy técnico, permítanme el pecado de la simplificación. Si el explosivo utilizado en los trenes ha sido goma 2 ECO, es verdad la teoría oficial y contenida en la instrucción del juez del Olmo: ETA no ha tenido nada que ver, y todo ha sido responsabilidad de los islamistas. El explosivo es el comprado a la trama asturiana, y punto. Segunda posibilidad: si el explosivo ha sido otro, pero no titadyne, caben todas las especulaciones. Y la tercera, que haya sido titadyne. Es ese caso, no hay duda: la autora ha sido ETA, porque es la dinamita que roba en Francia y siempre utilizó. Esa es la radical importancia de la aclaración final. Ruego a los lectores que sepan disculparme esta incursión pseudo científica, pero es incómodamente necesaria para entender la trama. La verdad de hoy, después de conocer el informe pericial, es que ha sido goma 2 ECO. Es decir, no ha sido ETA. Pero, como hay discrepancias entre peritos, alguien se encargará de mantener las sombras. Ello significa que todavía se sigue buscando más la conexión etarra que los responsables efectivos y personales de la matanza. Y ello supone, de cara al debate político, que los portavoces del PP que hablan de estas cosas (básicamente Acebes y Zaplana) podrán seguir manteniendo que existen dudas en la instrucción. Añadan ustedes que hay medios informativos que no querrán quedar como mentirosos, y mantendrán sus tesis hasta el final. Ese es el marco del misterio. Sospecho que no será aclarado hasta que tengamos sentencia. Ahora mismo ya hay dos juicios: el que se celebra en la sala y el de algunos medios de información. Sobre los mismos hechos y datos, dos bloques de medios encuentran verdades contradictorias. Los efectos en la opinión pública son que se creen las versiones según la disposición de cada uno a aceptar la verdad. Es el peor clima para un juicio. Y es el mejor ambiente para quien quiere, proyecta o necesita mantener la teoría de la conspiración.