Irrenunciable
En defensa de la Iglesia El erudito italiano Vittorio Messori, es uno de los principales conductores de la Liga Anti-Difamación Católica que postula los derechos de la verdad y dignidad de las personas. «Se trata de hacer comprender que los católicos tenemos una dignidad, unos valores y unas cosas que son sagradas para nosotros», concluye su presidente Pietro Siffi. Un equipo de estudiosos, entre los que se localiza Messori, han puesto en movimiento la institución; Catholic Anti-Defamation League (CADL), la primera agrupación que busca sistematizar una estrategia universal para proteger a la Iglesia Católica de las embestidas exteriores. La asociación, que ha despertado simpatías en el Vaticano, operará de modo separado e independiente, afirma. En sus reglamentos se asevera que las «agresiones contra el cristianismo, la Iglesia y los católicos en general se están especializando; se va desde la blasfemia a la violencia verbal, del vilipendio contra el Sumo Pontífice a la sátira irreverente, de la provocación del sentir religioso a la falsedad histórica». Trabajará para sistematizar una serie de iniciativas que van desde el rechazo de campañas publicitarias con mensajes blasfemos, hasta la acción legal contra quienes afrentan la sensibilidad de los católicos. Según expone su presidente, no se tramitarán solamente las denuncias a las agresiones contra la sensibilidad católica sino que, también, se solicitará de los medios de comunicación una mayor exactitud en la información que hace alusión a la Iglesia Católica. «Pongamos por caso que detectamos una publicidad de contenidos blasfemos, en la que se ridiculiza la figura de la Virgen. Primero la ponemos en manos de las autoridades, a través de nuestros abogados. Después nos constituimos como parte civil. Posteriormente sensibilizamos a los medios de comunicación y empleamos Internet. Como última medida, promovemos, entre los católicos, el boicot del producto anunciado con una blasfemia», asevera Siffi. «Desde hace mucho tiempo he afirmado y seguiré aseverando que la blasfemia es el arma de los cobardes». Clemente Ferrer Roselló ¿Tomás o Sebastián? El sacrificio que Miguel Sebastián haciendo de mártir por su presidente, hasta las elecciones del 27 de mayo por la alcaldía de Madrid, se ve correspondido con una buena sombra gubernamental que lo cobija del tórrido sol querellante contra él y su oficina monclovita avivados por Conthe. Quien opa último opa mejor alababa su labor ante la opa de Enel y Acciona, creyendo igualmente que quien acude a una avería de una infraestructura es el que realmente la inaugura. Eso es lo que ha hecho por la rotura de una tubería que ha inundado uno de los recientemente puestos en servicio, túneles de la M-30. Si una avería o atentado en Madrid le llama, Sebastián lo deja todo , como ya hizo al acompañar a ZP en las ruinas de la T-4 de Barajas. Seguro de sí mismo que su martirio madrileño goza de ser sólo propagandístico, hace doblete de santo Tomás al ir a tocar la herida en la M-30, dice que grieta, antes que esta circunvalación de nuevo resucite. Hombre de poca fe, este Sebastián. También de poca información, porque al dejar su mitin por ir a fotografiarse y ver la inundación del túnel, se preguntaba si eso era posible con unas precipitaciones normales de abril. Llueve sobre mojado para explicar ingeniería civil al ingeniero financiero. Preguntará a Gallardón pidiéndole una comparecencia pública y hasta una auditoría. Vengan auditorías. A lo mejor una de ellas nos ilumina sobre la energía que utilizó en sus manejos de las opas y los reguladores. José Carlos Navarro Muñoz (Mérida, Badajoz). Ramón G.M. (Colmenar Viejo. Madrid).