Caín 1907

A VECES en la Opinión del Lector alguno se queja de ser ciudadano de segunda por vivir en los barrios y eso que en lo que se refiere al asfalto no hay diferencias con el centro. Pero a veces entiendo lo que quieren decir esos lectores. Por ejemplo, me imagino a los vecinos de la calle Gregorio Pérez Demaría «El Cainejo», justo al lado del centro comercial Espacio León, que deben estar investigando qué es lo que han hecho para ser tratados de forma tercermundista. Viven en una zona nueva, en expansión, de esas con las que se llenan muchos la boca al hablar, y sin embargo están rodeados de suciedad. Como no hay viviendas en la acera de los impares, el solar está lleno de bolsas y de la más variada basura. Algo impropio, porque debería estar vallado y en ese caso sólo podrían ver la suciedad los vecinos desde las ventanas, pero no ser contemplada por el que pasa por la calle. Bueno, lo de ser contemplada es un decir, porque eso puede ocurrir de día, pero no de noche. Y es que sólo hay farolas a un lado de la calle, en las fachadas de los edificios, y supongo que algo ha pasado con esos vecinos para que el Ayuntamiento les castigue con la oscuridad más absoluta, porque las farolas no se encienden. Por lo menos no estaban encendidas el pasado miércoles, día 2, pasadas las diez de la noche. La calle estaba como la boca del lobo, aunque las colindantes tenían luz. O sea, que como en el Caín de Gregorio en su época. Digo yo que será para que no desentone y El Cainejo se sienta a gusto. Pero como los vecinos ya no viven en aquella época, sino casi un siglo después, supongo que estarán pensando no pagar los impuestos municipales, pues sin luz ni basura... Tercermundista.