Más vale tarde...

LA IMPREVISIÓN es propia de la condición humana, pero más vale tarde que nunca: el jefe del Estado Mayor de la Defensa, Félix Sanz, dio órdenes de enviar con carácter urgente a Líbano cuatro BMR dotados con inhibidores, mientras que otros tres se prepararán durante la semana y treinta inhibidores más se instalarán en los vehículos que ya tienen en ese país las tropas españolas. Ciertamente, los demás contingentes de otros países desplegados en Líbano no disponían de este sistema de seguridad, por lo que nuestro país no ha de ser señalado con el dedo. La polémica suscitada, que ha irritado a nuestros aliados (Al Qaeda ya sabe que sus enemigos no tienen inhibidores), nos ha dejado un poco en ridículo: aquí, como siempre, nos acordamos de Santa Bárbara cuando truena.