Olas y energía

HASTA ahora la fuerza del oleaje, capaz de erosionar acantilados y romper diques y escolleras, se había aprovechado en los antiguos molinos de marea, como los restaurados en las Marismas de Santoña que antaño molían maíz. El proyecto WaveSSG de la Unión Europea para fomentar las olas como energía renovable llega en buen momento, con la preocupación por el calentamiento del clima y la crisis del petróleo. Un consorcio ha diseñado un generador de energía apoyado en el principio del rebase de las olas y que emplea un total de tres presas construidas una sobre otra. El agua marina capturada por las presas pasa a través de una turbina multietapa que genera electricidad. Este diseño de tres niveles permit e capturar tanto olas grandes como pequeñas, garantía de producción constante, haya buena o mala mar. Tras extensas pruebas de laboratorio, se ha establecido la planta piloto en el rompeolas de Kvitsoy, pequeña isla de 520 habitantes cercana al litoral de Noruega. En función del oleaje de este enclave, el convertidor atrapa olas de tres tamaños: 1.5, 3 y 5 metros. Se calcula que esta turbina puede producir 200.000 kilovatios al año, suficientes para suministrar energía a diez viviendas del islote. En el caso de que el sistema se instalara en un rompeolas de 500 metros, entonces estaríamos hablando de 20 gigavatios por hora al año,, cantidad de electricidad suficiente para cuatro mil hogares. El presupuesto, en su 95%, se gasta en hormigón para la triple estructura de rompeolas, pero si este ya existiera, el coste sería mucho más bajo. Al igual que con los parques eólicos y sus efectos ambientales, aquí hay que analizar el impacto de la estructura y el generador en dos aspectos, el ruido y la alteración de los sedimentos marinos. Se sabe que determinados sonidos espantan a ciertos bancos de peces y que la alteración del jueg o del oleaje puede modificar playas y puertos. En 2008 se va a popularizar la turbina Seawave Slot-Cone. ¿La veremos en España?