A este lado de las banderas

TODA BANDERA lleva un patriota como mástil, pero no todo patriota enarbola bandera, dicho sea con todo respeto al patriotismo y a los símbolos textiles que ondea, por los que sentimos devoción. Pero en países como el nuestro, con una Historia como la nuestra, el sacar las banderas al viento puede significar que los españoles que habiten fuera del círculo bondadoso en que las banderas y los ánimos se agitan pierdan automáticamente su condición de buenos españoles, de españoles sencillos y orgullosos de serlo. Para un patriota sincero pero tibio, viviendo entre quienes honran a España trabajando honradamente, el salir hoy a la calle sin bandera puede resultar enojoso por la sensación virtual o real de que si se cruza con patriotas no van a mirarle bien. Hoy se celebra la fiesta nacional, que es obviamente de todos los españoles, gran parte de los cuales se apoyan en ella, pues mucho tiene de pilar para extender el fin de semana, convirtiéndolo en puente. Pero a quienes, por ejemplo, permanezcan en Madrid se les ha abierto la posibilidad de presenciar el desfile militar conmemorativo, llevando al hombro la bandera de todos los españoles en respuesta a un llamamiento apasionado del líder popular Mariano Rajoy. El PP ha hecho y divulgado un video en el que se ve a Rajoy, en actitud institucional, animando a la ciudadanía a honrar y exhibir la bandera. Y anima a celebrar esta fiesta de una manera especial «por razones que todo el mundo conoce». Y termina con dos gritos que bien podrían llegar a ser de rigor si el 12 de octubre cuajase como tradición en el ánimo de los españoles: «¡Feliz día de la nación española!» y «¡Feliz fiesta nacional!». El eco publicitario de este video ha sorprendido a la propia empresa tanto como ha molestado en el ámbito sociopolítico ajeno al PP. Pero Rajoy se ha separado del cruce de fuego graneado diciendo que «yo no quiero polémicas, yo hablo de España, de mi bandera, de mi país, de mis amigos, de los españoles que estamos muy felices de serlo». Lo que más sorprende de este video es que tras su apasionado y febril nacionalismo, su estilo kitch y esa apariencia de peliculilla anticuada podría estar el secreto de su éxito, por el que se ha trabajado muy de firme en Génova 13 durante una semana. Rajoy habría querido aparecerse a la sociedad lanzando un mensaje que había anticipado a principios del siglo XIX el alcalde de Móstoles, aunque los dos mensajes tienden a conjurar la misma amenaza, porque la patria, ahora el Estado, está en peligro. Para portavoces del PP, la economía es un tema preelectoral importante, pero no tanto como el terrorismo, por lo que va a ser el terrorismo, hasta las elecciones, donde el PP cargue sus baterías. Por el terrorismo, aseguraba ayer un dirigente popular, el Estado está en peligro. Hay que instalarse a este lado de las banderas.