Barcial

LOS BOTÁNICOS de la universidad de León han editado el número 17 de la revista Itinera Geobotánica con un nuevo mapa de las series de vegetación de España, coordinado por Salvador Rivas-Martínez, calvorota gurú de las plantas ibéricas. En esta obra viene un glosario de términos muy útil para entender algunos parajes del territorio hispano. Siempre me gustó el nombre de Barcial o Llano Barcial, frecuente por ejemplo en parajes del sur de León, como Valdespino de Vaca, Valderas o la cuenca del Jamuz, y nombre de una famosa ganadería de bravo de Salamanca, de toros veletos y calceteros. Al consultar este libro me entero de que barcial, o berceal, son los sitios poblados de berceos , la gramínea de gran porte que recibe el nombre latino de estipa gigantesca. Hay palabras bien bonitas, caso de bardal, el seto de suelos húmedos en los que suelen ser comunes sauces, bardas, mimbreras o bardagueras y arraclanes. Otra es cardizal, el terreno poblado por cardos, entre los que cabe destacar los cardos de María, los borriqueros o tobas y los cardos corredores, mina de las setas de cardo que empiezan a aparecer en los cabezos verdeantes por las últimas lluvias. Para desdicha de los leonesistas, no se recogen términos exclusivos de León, aunque aparece el perverso nombre de catalánides, unidad geológica de orogenia alpina que alude al conjunto de sierras y depresiones costeras de Cataluña, paralelas al litoral, desde la fosa antepirenaica del Ampurdán al Ebro. Habrá que echar un rapapolvos bromista a Ángel Penas, rector y botánico editor del opúsculo, por no inventar leónides, unidad patriota que desde el puerto de Ancares, el Teleno y los Picos de Europa llega a Villaquejida, confín del Esla, repleta de endemismos cazurros.. Otra palabra preciosa es cornical, en mi lamentable cultura vergonzoso lugar de reunión de cornudos, pero en realidad terreno poblado por cornicales, fruticeda árida distribuida por Murcia y Almería, que pierde las hojas en el verano. 1397124194