Hombría protectora

EL 21 DE NOVIEMBRE un padre muere al intentar salvar a sus hijos, a quienes un golpe de mar había arrastrado; la madre también estaba presente, pero fue el padre el que se lanzó al agua y murió después de salvar a uno de los hijos. En el hundimiento del Titanic se salvaron un 74% de mujeres, un 55% de niños frente al 22% de hombres. Una mayoría de hombres dieron sus vidas voluntariamente para que mujeres y niños/as se salvaran; si los hombres hubieran valorado sus vidas por encima de la de las mujeres y niños, lo hubieran tenido fácil dada su mayor fuerza física. ¿Qué es lo que hace que los hombres arriesguen sus vidas incluso las entreguen para salvar a mujeres y niños/as? Quizá se deba a su identidad de género, tan denigrada en estos tiempos. Si estos hombres consideraran a las mujeres seres menos valiosos que ellos ¿arriesgarían sus vidas o su integridad física para defenderlas? El proteger y salvar a mujeres y niños/as es uno de los componentes de la masculinidad. En la construcción de la identidad masculina también se considera poco viril pegar o agredir a las mujeres y los/as niños/as; es conocida la frase «pegar a mujeres y niños no es de hombres». Esto ha tenido un triste reflejo recientemente: un grupo de misioneros coreanos fueron secuestrados en Afganistán por talibanes; la mayoría eran mujeres, los secuestradores declararon que iban a matarlos empezando por los hombres y así fue, mataron a dos hombres antes de liberar al resto del grupo, se salvaron todas las mujeres. Cumpliéndose el manual «yihadista» sobre el asesinato que dice: - «es ilícito asesinar a niños, mujeres, ancianos y enfermos». ¿Qué sentido tiene calificar como violencia de género la muerte de mujeres por hombres? Las estadísticas muestran cómo los países con mayor tradición en las políticas de igualdad de género encabezan la lista de mujeres muertas a manos de sus parejas; Finlandia ha encabezado la lista en años sucesivos, siendo un país en que el sufragio universal se logró al mismo tiempo para hombres y mujeres. Las investigaciones sobre maltrato, hechas con muestra masculina y femenina también apuntan en la misma dirección. Los resultados de un estudio efectuado por Murray A. Strauss sobre violencia en 32 países muestran que casi un tercio de las mujeres y de los hombres agredieron físicamente a una pareja, y que el patrón más frecuente fue la violencia mutua, seguida por la violencia exclusivamente femenina. La violencia exclusiva por parte del hombre era el patrón menos frecuente según los participantes femeninos y masculinos. Estos resultados concuerdan con la educación tradicional de los varones que tradicionalmente se les ha enseñado a no pegar a niños/as y mujeres. También es cierto que debido a la mayor fuerza física masculina las mujeres tienen lesiones más graves en peleas físicas. Pero las mujeres tienen mayor capacidad verbal, más capacidad empática, esto es, manejan mejor los sentimientos propios y ajenos para bien y para mal. Las mujeres están mejor dotadas para el maltrato psicológico; además de contar con la condescendencia de la sociedad y la de los propios hombres: tanto a nivel personal como social a los hombres les resulta muy difícil reconocerse como víctimas. En cuanto a la teoría del poder de los hombres sobre las mujeres como explicación de la violencia de género, podemos decir que surgió de la aplicación de la teoría de clases a las diferencias de género. No en vano, una de las fuentes del feminismo es el marxismo. A raíz de esta hipótesis, se da por hecho que la violencia sólo se da de hombres a mujeres, se construyen instrumentos para medir el maltrato, como la encuesta del Instituto de la Mujer, la cual sólo se pasa a mujeres, ¿Cuántas de las preguntas de dicha encuesta darían positivo en caso de pasarla también a hombres? Ejemplo de algunas preguntas: 1. ¿Le impide ver a su familia o tener relaciones con sus amigos?. Los hombres se distancian más de sus familias de origen que las mujeres, éstas se arrastran hacia sus familias. En cuanto a los amigos ¿cuántas mujeres se enfadan y montan la bronca cuando sus parejas vienen de estar con los amigos en lugar de hacer ellas lo mismo, esto es, cultivar su vida social? 2. ¿Le quita el dinero que usted gana o no le da lo suficiente para mantenerse?. ¿Cuántas mujeres controlan todo el dinero que entra en casa, dándoles «una paga» a los hombres? 3. ¿Hace oídos sordos a lo que usted le dice, no tiene en cuenta su opinión, no escucha sus peticiones?. Cuántas mujeres no quieren oír hablar de los temas que a sus maridos les interesa, cuántas toman decisiones sobre toda la familia, incluida la economía, sin tener en cuenta la opinión de sus parejas; cuántas mujeres no saben ni les importa, lo que sus parejas quieren, les gusta¿ 13. ¿Se enfada sin que sepa la razón? Que pregunten a los hombres cuántas veces se enfadan sus parejas sin que sepan la razón. 14. ¿Delante de los hijos dice cosas para no dejarle a usted en buen lugar? ¿Cuántas veces lo hacen las mujeres: «inútil, vago», «porque tu padre es un¿»? La teoría del poder de todos los hombres sobre las mujeres, tanto en el espacio público como privado, es una hipótesis que alimenta al orgullo masculino, tal y como sucede en otros ámbitos; por ejemplo, en las guerras la mayoría de los muertos, mutilados, prisioneros y torturados son hombres pero se les convence de que son héroes¿ El ámbito público ha sido de los hombres para bien y para mal: el poder está en manos de unos pocos hombres, pero las tareas de mayor riesgo (soldados, minería, construcción, mar¿) la realizan una mayoría de hombres sin poder. El ámbito privado ha sido de la mujer, también para bien y para mal: para asumir el trabajo del hogar y las responsabilidades sobre los hijos/as pero teniendo mayor capacidad de manejo e influencia dentro de las relaciones familiares. El poder sobre los/as hijos/as es de las mujeres. La mayoría de los núcleos familiares se acercan a las familias de las mujeres, en detrimento de las familias de los padres. Todos estos datos ponen en entredicho la teoría del poder de los hombres sobre las mujeres como única causa de la muerte de las mujeres a manos de hombres, coincidiendo con la falta de resultados de las medidas que desde dicha hipótesis de trabajo se pusieron en marcha: ordenes de alejamiento que las mismas mujeres se saltan, prisión provisional,¿