Kosovo, bajo la tutela de la Otan

ANTE LA eventualidad de que hoy se proclame unilateralmente la independencia de Kosovo, el Consejo Atlántico de la Otan permanece vigilante: en la apertura del consejo, el secretario general de la Otan, Jaap de Hoop, resaltó la determinación de la Alianza para que Kosovo sea un lugar en el que «albanokosovares y serbios sean capaces de vivir juntos, en paz y sin temor», por lo que amenazó con dar «una respuesta contundente» contra «cualquiera que ejerza la violencia». El Consejo Atlántico formado por los ministros de Asuntos Exteriores de los veintiséis países miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, está decidido a mantener la misión militar y reforzar sus 16.000 efectivos en caso necesario. «El compromiso con la estabilidad de la región continúa siendo crucial», dijo el secretario general de la Otan. En cualquier caso, la secesión que va a producirse, y a la que la comunidad internacional difícilmente puede negarse después del maltrato genocida deparado a la región por la Serbia de Milosevic, sienta un inquietante precedente que habrá que tratar con delicadeza para que no perturbe al resto de Europa.