Cerrar

CANTO RODADO AQUÍ Y AHORA

Sin complejos El regocijo y la furia

Publicado por
ANA GAITERO PEDRO CALVO
León

Creado:

Actualizado:

LA BAÑEZA se convirtió ayer en el eco de una idea -conectar a León con Portugal por autovía- que de tanto sentido común como entraña ha quedado relegada al cajón de los sueños y de las utopías. Se dijo ayer varias veces: León no puede seguir de espaldas a Portugal, un país que ha salido más tarde que España del atraso pero que se ha dado más prisa en modernizar sus vías de comunicación con el país vecino. Tan lejos nos sentimos de Portugal que ni siquiera se ha reparado, ahora que el aeropuerto de León está en alza, en otro detalle: Bragança, con una buena vía de comunicación tiene más cerca al aeropuerto de León que el de Oporto. La jornada puso muchas expectativas encima de la mesa de la biblioteca pública de La Bañeza y también puso en evidencia a la Junta y al Estado. Ni una ni otro han sabido ponerse de acuerdo para sacar adelante un proyecto que sacaría del aislamiento a comarcas tradicionalmente deprimidas, a la vez que conseguiría colocar a León como eje real de las comunicaciones en el noroeste peninsular. Que los principales municipios del eje León-Bragança hagan un frente común para reclamar esta vía de comunicación es un punto de partida, además, para iniciar una lógica y necesaria relación cultural, turística y comercial entre las principales ciudades y cabeceras de comarca. En definitiva, establecer flujos de riqueza que benefician a todas, en lugar de absurdas competiciones para que unas pocas, las más grandes, obtengan pingües beneficios. La autovía de León a Bragança es un proyecto local con vocación global. Y quizá esta sea una de las cosas más hermosas de esta idea en la que tanto entusiasmo se está vertiendo. Conecta Santa Mª del Páramo, La Bañeza, Castrocontrigo, Puebla de Sanabria, Bragança... pero este pequeño tramo de 167 kilómetros conecta al norte de Portugal con Europa por carretera y por las futuras autopistas del mar. Como dijo Sabino Ordás, parafraseando al genial escritor portugués, Miguel Torga, lo universal es lo local sin complejos. LOS MANDOS del PP se regocijan con los problemas que aparecen en la economía y los exageran hasta el infinito, para sacar réditos electorales, sin importarles un bledo los perjuicios que siempre derivan de la siembra de la desconfianza económica. Y ahora mismo se enfurecen (Zaplana) ante la perspectiva de un inminente inicio por el Gobierno del proceso de ilegalización de ANV y el PCTV, cuando llevan largos meses pesadísimos increpando a Zapatero porque no lo hubiera iniciado. Claro, piensan que eso les quita un gran argumento electoral, otro más, y eso lo ponen por encima de todo. Y sufren ostensiblemente ante las excelentísimas relaciones de Zapatero con Sarkozy, como acaba de verse en la cumbre de París, con los históricos acuerdos antiterroristas, porque temen que también eso les perjudique electoralmente. Y aprov echan la polémica de los obispos y el Gobierno soltando ahora Rajoy la bobada del Ministerio de la Familia; será de la familia tradicional, católica, homófoba y ultraconservadora, lo coherente con lo de la plaza de Colón. Y tratan de disimular los enfrentamientos a muerte dentro del propio PP por culpa de las listas electorales, que permanecen secretas cuando los comicios están a la vuelta de la esquina. Parece que el colmo de tales enfrentamientos está en el viejo asunto de la presencia o no de Ruiz-Gallardón en la lista al Congreso por Madrid, en la que el alcalde estaba empeñado en meterse de número dos, pretensión que ha contado siempre y cuenta ahora con la encarnizada oposición de Esperanza Aguirre, que es la presidenta del PP de Madrid y la que tiene que dar su visto bueno a las listas madrileñas. Como siempre, Rajoy sigue indeciso y sin fuerzas para asentar ahí su autoridad y parece que no se atreverá a corregir desde el comité nacional la decisión del comité madrileño del partido. Y sigue diciendo públicamente que los temas personales de las listas carecen de importancia y que lo que importa es el programa, del que tampoco conocemos nada más que chispazos chuscos cono el del Ministerio de la Familia. Y así hasta el infinito.

Cargando contenidos...