CANTO RODADO
Comunidad fragmentada
COMPITE el heroísmo: revuelta contra los franceses en León y Villalar en Valladolid. Los intereses políticos quieren inclinar la balanza de la realidad con kilos de historia extraídos con fruición de entre los legajos. Nos quieren hacer creer que la movilización decimonónica de León contra Francia o para sujetar en el trono a Fernando VII fue más heroíca que la revuelta de los Comuneros del siglo XVI y, viceversa. Sin duda, trasladar la fiesta local de San Froilán al día después de los fastos del Gobierno autonómico en Valladolid ha sido muy oportuno, aunque la simbólica celebración leonesa no puede competir con la afluencia a la campa pucelana, otrora foro reivindicativo de la izquierda castellana. La imagen fragmentada de la fiesta de la comunidad es elocuente: es el vivo retrato de la fragmentación geopolítica y económica, por la que tanto se trabaja desde Valladolid. La capital de facto de Castilla y León pretende engullir y beneficiarse de todas las sinergias que aporta la instalación de todo el gobierno autonómico y las Cortes de Castilla y León en esta capital. Pero no contenta con ello, trabaja también denodadamente por usurpar a las otras provincias sus propias capacidades, a cambio de una política paternalista que reparte migajas aquí y allí. Y León es una de las más dañadas. Ahora, Valladolid tiene puestas sus miras en ser «el centro estratégico» del noroeste y para ello está dispuesta a hacer todos los «trasvases» que sean necesarios: definir en la red logística como único eje transeuropeo entre Portugal, Castilla y León y el resto de Europa el trazado desde Oporto a Salamanca, pasando por Valladolid, es sólo parte de un plan perfectamente diseñado en los despachos. El PSOE tiene tantas contradicciones en este terreno que ha tenido que llamar a un diputado «cunero» para hacerse con el control del partido en Castilla y León, mientras el PP tiene la desfachatez de votar en contra la moción de la UPL para incluir a la futura León-Bragança en la red logística de Castilla y León y Villanueva se atreve a venir a Ponferrada a dar consejos sobre desarrollo. ¿Usted se fiaría?