Sostiene Rajoy
EL PRESIDENTE del PP y líder de la oposición hizo esta semana unas manifestaciones un tanto sorprendentes, de las que se deduce que cree al Gobierno cuando este dice que no hay ni habrá una nueva negociación política con ETA. Rajoy aplaude lo que entiende ha sido una «rectificación» de Zapatero respecto a la política antiterrorista que llevó a cabo la pasada legislatura y, eso sí, exige al ejecutivo que tome las medidas necesarias para expulsar cuanto antes a ANV de los ayuntamientos vascos y navarros. A las veinticuatro horas de mostrarse tan condescendiente con el Gobierno, el PSOE rechazó en el Congreso, con el apoyo de IU y de los nacionalistas una iniciativa de la diputada de UPyD, Rosa Diez, en la que se pedía esa expulsión del brazo político de ETA. A las cuarenta y ocho horas, ese mismo rechazo se llevó a cabo en el Senado. ¿Seguirá pensando Rajoy lo mismo?
Es verdad que la inmensa mayoría de los españoles quieren ver a los dos grandes partidos nacionales unidos en la lucha contra el terrorismo. Pero la unidad como tal no es un fin en sí mismo. Si no es para derrotar a ETA, no sirve para nada. ¿Está seguro Rajoy que Zapatero busca, de verdad, la derrota definitiva y total de ETA? o ¿no es más cierto que el presidente preferiría un escenario donde, por ejemplo, por una debilidad operativa de la banda terrorista, está se plegara a negociar su final, a cambio de alguna contrapartida? ¿Considera Rajoy que las excusas de tipo legal que pone el Gobierno para no proceder a la disolución de los Ayuntamientos donde está ANV no tienen una directa relación con un interés partidista del PSE y de Zapatero de no presentar una cara excesivamente radical a cuatro meses de las elecciones vascas? ¿Por qué cree el presidente del PP que Zapatero se niegue también a derogar la resolución que aprobó el Congresoen mayo de 2005 y que le autorizaba a negociar con ETA?
Zapatero y Rajoy acordaron a finales de julio un nuevo «pacto antiterrorista» de cinco puntos pero del que no se conoce su literalidad, porque entre otros detalles «menores», el líder de la oposición transigió con el deseo del presidente de que no se firmara públicamente como si se hizo con el del año 2000. Paralelamente, el ministro del Interior suele mantener informado al responsable del área de Interior y Justicia del PP, Federico Trillo, que no oculta en privado su satisfacción con esa interlocución, aunque siempre aclara que él no se «chupa el dedo» con Rubalcaba, aunque a veces de la impresión de todo lo contrario. Rajoy no debería dar un cheque en blanco a Zapatero para que luego este haga lo que le venga en gana. Con las veces que el presidente mintió a los españoles en la pasada legislatura respecto a su negociación con ETA; con las veces que le mintió al propio Rajoy, éste tendría que ser un poco más cauto.