Asignatura de productividad

LAS CONCLUSIONES arrojadas por un estudio que acaba de publicar la Fundación de las Cajas de Ahorros sobre la evolución de la productividad española durante los últimos trece años ofrecen un balance desolador que confirma la incapacidad de nuestra economía para insertar el progreso tecnológico en la productividad. En los siete años de mayor crecimiento a un promedio de un 3,6% no se ha logrado corregir uno de los principales defectos de la economía española que continuó sustentando su crecimiento en los factores del empleo y la construcción. Ahora, en plena recesión, el cuerpo empresarial no puede cerrarse sobre sí mismo con la excusa de la crisis, sino hacer de la necesidad virtud para fomentar la inversión en capital tecnológico y en formación del capital humano que son los pilares del crecimiento de la productividad. Si España no da el paso de una vez y aprueba esa asignatura pendiente seguirá siendo una economía con los pies de barro.