El triunfo de la ambición

LA VICTORIA de Marc Coma en el Dakar, por primera vez «americano», es el triunfo de la sana ambición que el motociclista catalán ha mostrado en todo momento para ganar en tan extraordinario desafío. Un empeño y una confianza que no había ocultado en al hacer públicos sus pronósticos. Se trata, por segunda vez tras su victoria de 2006, del triunfo de toda una vida entregada a las motos y a la competición. Y un ejemplo de cómo puede disputarse una prueba tan exigente sin concesiones hacia los demás, siendo agraciado por la suerte, pero sin que ello le reste a la hazaña la deportividad mostrada en todo momento por Coma.