LETRA PEQUEÑA | JULIA NAVARRO
La catarsis
EL PP NECESITA una catarsis y cuánto antes mejor. Las encuestas indican que el PP está en caída libre, que pese a la gravedad de la situaicón económica y que Rodríguez Zapatero ya no entusiasma a casi nadie, pese a eso, los españoles prefieren sgeuir confiando en el PSOE. La guerra de los espías está perjudicando gravemente al PP en general, pero también a Mariano Rajoy, Esperanza Aguirre, Ruíz Gallardón, y a los consejeros Ignacio González, Prada, etcétera. Pero Mariano Rajoy permenece impasible ante este maremoto. La realidad es que el PP no sólo no está unido sino que se ha convertido en un partido de banderías, donde las ambiciones políticas de muchos de sus dirigentes se anteponen a esa necesaria unidad, y a todo eso hay que añadir que si esas ambiciones están a flor de piel es porque no se reconoce el liderazgo de Rajoy. Hay quien asegura que Rajoy no tiene más remedio que tirar millas y esperar a los resultados de las elecciones vascas, gallegas y europeas, y que luego ya se verá. Otros por el contrario aseguran que Rajoy se ha instalado en el resistir es vencer, y que piensa agotar a sus oponentes por cansancio, y en esa estrategía de espera también parece incluir que algún día llegara a la Moncloa porque en algún momento Zapatero dará un traspies tan grande que la única alternativa sea él.
Así las cosas, los militantes y simpatizantes del PP están sumidos en una cierta desesperación ante el espectáculo que están dando los dirigentes de su partido. Desde luego, el presidente Zapatero puede estar tranquilo, no sólo porque las encuestas le auguran que continuará gobernando en el futuro, sino porque puede hacer y deshacer a su antojo sabiendo que no tiene a nadie enfrente. Rajoy acertó eligiendo a Soraya Senz de Santamaría y a Maria Dolores de Cospedal para ser la nueva imagen del partido, y ambas han logrado dar una imagen más centrada del PP, pero a la postre tanto da lo que estas dos políticas puedan hacer, el problema principal que tiene el PP es de liderazgo, y cuanto más tarde lo resuelvan más tardarán los ciudadnaos en volver a verles como a un partido de gobierno. El PP está abocado a la catarsis si quiere recuperar la confianza de los ciudadanos.