Normativa y circulación

Recientemente ha habido importantes reformas en la normativa de circulación, y ya sea por la nueva Ley de carné por puntos, por las reformas del Código Penal que han endurecido las penas en materia de seguridad vial, por las campañas de sensibilización o por todo ello, el hecho es que las cosas han mejorado considerablemente ha habido grandes progresos y esto se refleja en el número cada vez menor de accidentes y de víctimas. A diario hago el trayecto de ida y vuelta entre Ponferrada, donde resido, y León, donde trabajo, y veo que en León, en autopista, autovía y carretera, las cosas funcionan de manera aceptable: se cumplen las normas, se utiliza el cinturón de seguridad por conductores y ocupantes, y las conductas imprudentes son casos aislados, aunque seguimos circulando por encima de los límites de velocidad.El problema surge cuando se llega a Ponferrada, momento en que tienes que extremar las precauciones porque es como entrar en la jungla. Aquí no se utiliza el cinturón de seguridad, se conduce hablando por el móvil; hay muchos niños que viajan sin las debidas medidas de sujeción; se circula a velocidad excesiva, poniendo en peligro a los peatones, sin respetar los carriles o las líneas que impiden adelantar y a veces haciendo competiciones; se aparca en cualquier parte, no respetándose paradas de bus, pasos de peatones, rotondas, aceras, jardines, zonas peatonales, de carga y descarga, o espacios reservados para minusválidos y ello con la seguridad de que no serás sancionado ni la grúa se llevará tu vehículo. Ahora que llega el buen tiempo, hay que hacer una mención especial a los ciclomotores, motocicletas y quads, que en infinidad de ocasiones circulan a velocidad excesiva, sin luces, por la acera, por dirección contraria, haciendo un ruido atronador de día y de noche, compitiendo o haciendo «caballitos» y en algunos casos sin utilizar casco. Son infracciones tan graves que, si se sancionasen, harían perder en un segundo todos los puntos del carné a muchos conductores. Estas infracciones raras veces se sancionan, nunca se ve actuar a la grúa y apenas se ve a la Policía Municipal, pues la ciudad, que ha crecido a un ritmo realmente vertiginoso, tiene un déficit de sesenta policías para que se cumpla la ratio de 1,5 policías por cada 1.000 habitantes. Como se puede ver, éste es un problema muy grave, que requiere una urgente solución, pero que no parece ser una prioridad para las autoridades de Ponferrada a pesar de que el concejal del área manifestaba a este diario (7.2.2009) que «se han comenzado a dar los primeros pasos para elaborar un plan de seguridad vial como el que existe en Barcelona y Zaragoza».