Cerrar
Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

LA SELECCIÓN de las últimas películas de Pedro Almodóvar y de Isabel Coixet para competir por la Palma de Oro en Cannes, y la presencia en el festival de una tercera película de un director español -Alejandro Amenábar- fuera de la sección oficial constituye un motivo de satisfacción en un momento de creciente caída de los espectadores y de desapego de la crítica. No obstante, la buena noticia no debe hacer olvidar que Almodóvar no sólo ha sido mimado ya por un certamen tradicionalmente cicatero hacia la filmografía española, sino que su dimensión creativa le sitúa más allá de los márgenes de nuestra industria; algo que también comparten Coixet y Amenábar, habituados a las producciones de vocación internacional. De ahí que la vitalidad del cine español que reivindicó el director de Los abrazos rotos siga siendo más la de sus talentos individuales que la de un sector competitivo, lastrado por la falta de criterios y de recursos para convertirse en una industria solvente.