Un mensaje a los corsarios
LA ENTREGA a las autoridades keniatas de los 13 piratas somalíes detenidos por el buque «Marqués de la Ensenada» pone fin al inexplicable embrollo judicial en que se había enredado el Ministerio de Defensa, la Fiscalía y la Audiencia Nacional, al tiempo que encauza el enjuiciamiento de los arrestados en el país africano en virtud del convenio alcanzado con la Unión Europea. Esta vía debería enviar el mensaje a los nuevos corsarios de que no existe impunidad posible y de que serán juzgados por tribunales reconocidos por el conjunto de la comunidad internacional.