Prevención

La pandemia de la nueva gripe, su prevención y tratamiento, se ha convertido en un reto sobrevenido para el conjunto de la Sanidad española, que ha demostrado por el momento su capacidad para responder a las exigencias planteadas por un virus aún con menor incidencia que el estacional, pero que presenta interrogantes sobre su futura evolución. La previsión de 8.000 posibles muertes a partir de otoño -cifra equiparable a la de la gripe convencional- realizada por la ministra de Sanidad Trinidad Jiménez es la más moderada de las efectuadas por otras autoridades de nuestro entorno; una contención que podría verse desbordada por los hechos, pero que en este instante es preferible dado que resulta imposible pronosticar el alcance real que tendrá la enfermedad.