Trato discriminatorio

De la manera que mejor proceda, expreso en forma de denuncia, que si no fuera por el olvido flagrante en que ha incurrido el responsable de Vías y Obras de la Diputación de León, tendría que estar ahora redactando mi felicitación por el estado tan perfecto que han dejado la banda de rodadura de la carretera que une las localidades de Saelices del Payuelo y Villamuñío. Pero mira por qué poca cosa en lugar de enviar mi felicitación, tengo que remitir esta sugerencia o queja, la cual exijo que sea atendida a la mayor urgencia; pues no es un capricho mío, ni petición viciosa, es ni más ni menos que el sentir general del personal de estas localidades, reclamando que esta calzada sea pintada debidamente en su eje central y orillas, pues aunque esta petición ya se ha hecho con anterioridad en forma verbal, parece ser que estos pormenores se les pasan por el arco del triunfo. Explico: Hace bastante tiempo que fue asfaltada la carretera mencionada reparando los baches que tenía, los cuales fueron ocasionados por trabajos que realizaron en sus inmediaciones los técnicos de la concentración agraria, y el olvido a que me refiero, es que ha quedado la carretera sin pintar; insistiendo que no se tomen a broma este hecho, pues aunque a simple vista parezca que es un dato sin importancia (pues en realidad la tiene); está a punto de llegar el invierno, vendrán noches de niebla y entre la oscuridad y la humedad del asfalto sin la pintura que se solicita, se va cualquier conductor a la cuneta en el momento más inesperado acaeciendo lo peor. Interrogante: ¿Quién se hace responsable del accidente?, de los daños materiales, perjuicios y lesiones físicas y hasta víctimas personales; todo esto por no pintar escasos kilómetros de dicha vía pública. Aunque es de escasa entidad lo que se reclama, el personal de esta comarca está muy interesado en que esta pequeña obra se realice reclamando donde corresponda por un trato visiblemente discriminatorio ya que se están haciendo obras de más calado económico en esta provincia de León y menos necesarias de la que en este momento se solicita, todo ello al amparo del artículo 2 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos del año 1948.