UGT defiende la propuesta popular de un Bachillerato de tres años
Propone rebajar un año la ESO, que las administraciones flexibilicen en dos o tres años el Bachillerato según el rendimiento o aumentar en un curso los estudios
La UGT defiende un Bachillerato estructurado en tres años, una reordenación de esa etapa educativa para su ampliación, así como un reajuste de cuarto curso de la ESO, según explicó ayer el secretario general de Fete-UGT, Carlos López Cortiñas.
El secretario general de Fete-UGT señaló en rueda de prensa que es partidario de que las propuestas sean debatidas «en el seno del pacto por la educación», y se ha referido a tres posibilidades para llevar a cabo esta ampliación del Bachillerato, todas válidas, para el sindicato socialista, aunque cada opción plantea problemas.
Rebajar un año la ESO, como propone el PP, «rompe» con la enseñanza obligatoria hasta los 16 años, «una conquista social», ha dicho López Cortiñas. Aumentar un año los estudios, «deshomologa el acceso a la universidad» de los alumnos españoles con respecto a los de la UE. Y la tercera opción, permitir a las administraciones educativas flexibilizarla en dos o tres años el Bachillerato, dependiendo del rendimiento escolar, implica «modificar la LOE».
Para López Cortiñas, la «puesta en escena» del documento del PP en materia de Educación plantea dudas sobre si se trata de un punto de partida para dialogar, para buscar un acuerdo de mínimos, que sería bienvenido, o «fijan posición», y «no tenga la permeabilidad de buscar el acuerdo de mínimos».
Sin temores. Por su parte, la portavoz del PP en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, pide al PSOE que no tenga miedo a las reformas para avanzar en el Pacto por la Educación, el cual debe servir para que se cambie la situación actual, y haya una educación de calidad y los jóvenes encuentren empleo. «Los pactos se hacen discutiendo las medidas», señaló Sáenz de Santamaría. «Me sorprende mucho que una vez que el PP da un paso y pone propuestas para debatir, de repente parece que el PSOE tiene miedo a avanzar en ese pacto educativo», destacó.
Asimismo, el presidente de Banco Santander, Emilio Botín, considera muy importante para España un pacto a largo plazo en educación, que sea estratégico y no esté sujeto a cambios constantes.