Los mossos persiguen a tiros a dos ladrones por el centro de Barcelona
En el despliegue, uno de los más importantes y espectaculares de los últimos tiempos, resultaron heridos dos agentes en pleno centro de la capital catalana
Barcelona vivió ayer una espectacular redada para tratar de detener a dos presuntos atracadores que durante la madrugada hirieron en un tiroteo a dos Mossos d-™Esquadra en pleno centro de Barcelona. La búsqueda de los autores de los disparos, dos ciudadanos con rasgos físicos propios de ciudadanos del Este de Europa, que podrían formar parte de una banda de atracadores de prostíbulos, propició uno de los despliegues policiales más importantes de los últimos tiempos, similar a los que se activan en las operaciones antiterroristas, si bien, al cierre de esta edición, el cerco policial seguía sin dar frutos.
Los agentes de la Policía catalana entraron casa por casa, registraron aparcamientos y rebuscaron incluso bajo los coches o en contenedores de basuras, donde hallaron la escopeta recortada utilizada por los presuntos fugitivos, así como una mochila con el botín, abandonada en la huida. «Parecían escenas de una película, con policías corriendo de un lado para otro», explicó un vecino.
Paso a paso. Los hechos sucedieron sobre las 23.30 horas del jueves, cuando unos vecinos del inmueble donde ocurrió todo, en la calle Aragón, tocando con la Diagonal, en pleno Eixample de la capital catalana, alertaron a los Mossos de que en un piso del bloque se escuchaban muchos chillidos. «El dinero, el dinero», relató una vecina que vociferaban desde el apartamento. «Golpes, gritos, llantos, ha sido horrible, estaba en casa y una mujer ha subido por la escalera, pidiendo ayuda y luego llamé a la policía», relató un vecino del inmueble.
La vivienda en cuestión era una casa de citas donde ciudadanas orientales ejercen la prostitución. Los gritos respondían a que dos atracadores irrumpieron en el local para robar a clientes y propietarios del prostíbulo. Los agentes, alertados por los vecinos, subieron a ver qué ocurría en el piso y al entrar fueron recibidos a tiros. «Oímos disparos pero no te imaginas que puede ser de escopeta, yo pensaba que eran los petardos que lanza la gente cuando hay un partido de fútbol», señaló una residente del edificio.
En el tiroteo, los dos mossos resultaron heridos, ya que no llevaban chaleco antibalas, aunque a las horas uno fue dado de alta y el otro se esperaba que en breve pudiera correr la misma suerte.