Los médicos catalanes presentarán al paciente la factura de las medicinas
La medida es meramente informativa para que el usuario tome conciencia del coste
Desde que hace un mes Artur Mas accedió a la presidencia de la Generalitat, siempre ha afirmado que la administración tiene que apretarse el cinturón y que es preciso dar ejemplo desde el Gobierno. Lo da cuando viaja a Madrid en clase turista y cuando reduce el número de altos cargos del Govern en un 25%. Y lo hace también cuando anuncia que los médicos del servicio catalán de Salud entregarán una factura a los pacientes sobre el gasto farmacéutico que realizan.
La medida, que empezará a aplicarse el lunes que viene en los ambulatorios de Girona y se extenderá progresivamente por toda Cataluña, sólo es meramente informativa, los ciudadanos no tendrán que abonar el montante de la minuta, pero es un punto de partida para ir mentalizando a la gente de que debe gastar menos. «Es básico concienciar a la población del coste que suponen los tratamientos sanitarios», señaló este jueves el consejero catalán de salud, Boi Ruiz. «Se trata, añadió, de acabar con una conciencia de gratuidad que no es cierta».
«Los recursos no son ilimitados», dijo. «La sanidad es un bien escaso, y como tal tiene que ser utilizado con responsabilidad, sobre todo en estos momentos de crisis», añadió. El objetivo final de la iniciativa es controlar el gasto farmacéutico, que supone el 20% del presupuesto de sanidad de la Generalitat catalana. Así, a partir del 7 de febrero, cuando un paciente acuda al ambulatorio, recibirá una receta en la que se le detallará el precio total de los fármacos prescritos, y qué cantidad deberá pagar en la farmacia.
Por tanto, mostrará también el dinero que aporta el sistema de salud para subvencionar la compra de medicinas. Según explicó el conseller, la medida se ha probado ya en tres localidades catalanas y los usuarios consideraron como positivo y adecuado el hecho de conocer el coste de los fármacos en el actual contexto económico. Ruiz, que ya ha declarado que es partidario de introducir fórmulas de copago en la sanidad pública como el transporte o la comida de los enfermos aunque no ahora en momentos de crisis, repite por activa y por pasiva que hay que introducir reformas en el sistema, porque la situación financiera es muy delicada. Entre otras medidas, ayer propuso que lo empleados del sector sanitario público deberán ser más productivos y trabajar más horas porque, de lo contrario, no será posible sostener el sistema. «No con 35 horas semanales de trabajo», dijo en el Parlament, durante su primera intervención ante la Cámara catalana.
Además, anunció que reducirá la estructura central del sistema de salud, desaparecerán los consejeros delegados y se adelgazarán los consejos de administración.