CORNADA DE LOBO
Hábito guay
S olemnidad de tedeum, abarrotada la catedral, el nuncio en persona, tutiplén de autoridad civil, obispos, coros, liturgia vieja, color nuevo, magia mística, puesta de largo... era la catedral de Burgos, domingo prieto de feligresía... se presentaba oficialmente una nueva orden religiosa femenina (¡andá!)... cuenta con doscientas hermanas o miembras y un empuje arrollador que ha disparado de forma prodigiosa las vocaciones... la inmensa mayoría de sores tiene menos de 35 años (doncellez) y provienen del ámbito universitario (ojo al dato)... son una excisión de Santa Clara, las clarisas de toda la vida, las hijas de il poverello de Assisi , san Francisco, aquel rebelado cuyo sueño murió con él... se han adueñado de los conventos de Lerma y La Aguilera, dicen legítimamente resentidas las clarisas viejas; hay confusión y cierto malestar entre el clero burgalés... pero el tsunami vocacional que provocó la joven abadesa de Lerma llenó dos monasterios vacíos con jóvenes castellanoleonesas (me chifla este gentilicio que mete lo leonés fuera de León y en toda notica comunitaria o nacional... o en un convento lejano donde posiblemente no haya siquiera una leonesa). La fundadora de esta nueva orden (con poder otorgado por el Papa para «fundar» en cualquier parte del mundo) es una burgalesa juvenil e iluminada, 45 años, María José Berzosa Martínez (en religión, sor Verónica María)... su dinamismo cautiva, muchas jóvenes se encandilan con ella... el cardenal Rouco (uyuyuy) quiso llevársela a repoblar dos conventazos muertos que tiene en Madrid (Rouco agitó la burocracia vaticana, saltó plazos y logró el espaldarazo)... esta abadesa briosa es todo un fenómeno (y la única en la Iglesia que gobierna dos conventos a la vez)... tiene además hermano obispo en Ciudad Rodrigo, Raúl (creo que eso ayuda)... pero lo que más llama la atención es el nuevo hábito diseñado ad hoc... adiós al negro clariso... ahora es azul mahón, ¡de tela vaquera!, saya sencilla conjuntada con capillo oscuro y tocada de pañoleta azul clarito, como de operaria de taller o labriega... muy humildes, muy modelnas ... por eso pitan, aunque mosquea tanto estilismo... y elitismo... ya, pero el hábito, ayayay, ¡¡es guay del Paraguay!!