La última | Solidaridad
«No olvidéis Haití»
La recaudación del mercadillo solidario de San Marcelo se destinará a los proyectos de Mensajeros por la Paz en el país más pobre del mundo
El padre Ángel, de Mensajeros por la Paz y la concejala de Bienestar Social, Teresa Gutiérrez
Se les llama mercadillos, con diminutivo, porque se quedan muy pequeños si se comparan con la misión que llevan a cabo: recaudar fondos para que miles de personas en Haití puedan comer, al menos, una vez al día. Ese el destino de las ganancias que produzca el mercadillo solidario de Mensajeros de la Paz, que ayer levantó sus trapas en la plaza de San Marcelo.
El padre Ángel, líder de la organización, asegura que en Haití «todavía hay un millón de personas sin colchón donde dormir y es habitual que los niños coman cada tres o cuatro días y sólo una vez». Gran parte de ellos lo hacen únicamente en el campamento que Mensajeros por la Paz mantiene en Haití desde la fecha del terremoto, donde comen unas 4.000 personas al día. «No olvidéis Haití», es la petición que el padre Ángel traslada al pueblo de León, «que siempre ha sido solidario».
El mercadillo consta de 56 tiendas y estará abierto hasta el 8 de abril. Ese día el Ayuntamiento organiza una gala solidaria en el Auditorio, en la que también colabora Mensajeros por la Paz. Música, monólogos y magia por los siete euros que cuesta la entrada, que se destinará íntegramente a la colaboración con Haití. También se abrirá una fila 0 para recaudar donativos, el Ayuntamiento y las taquillas del Auditorio informarán del número de cuenta.
La concejala de Bienestar Social, Teresa Gutiérrez, afirma que todo el empeño está puesto en «colaborar con los países más desfavorecidos».
EL padre José Vicente Rodríguez, presidente de Mensajeros por la Paz en Castilla y León, desveló que «hace escasos días hemos encontrado un orfanato con 50 niños que llevaban casi desde el terremoto sin comer, sólo comían cada 3 ó 4 días». Rodríguez pide a los leoneses que demuestren que «ahora hay más solidaridad que nunca» y fija en el objetivo en lo que dijo Lula cuando tomó posesión en Brasil: «yo me conformaría con que comieran todos una vez al día; nosotros también lo haríamos en Haití».