La crisis aumenta la depresión
La dispensación de antidepresivos y ansiolíticos en las farmacias leonesas creció un 18% y un 14% entre 2008 y 2010 y salen al mercado más de cien nuevos genéricos
La crisis aumenta la depresión. Entre los años 2008 y 2010, en plena depresión económica, se dispensaron en las farmacias leonesas un 18% más de antidepresivos y un 14% más de ansiolíticos.
Según datos facilitados por la vocal del Colegio Oficial de Farmacéuticos de León, Manuela Barragán, en 2008 se vendieron un total de 516.000 envases de ansiolíticos en las farmacias leonesas mientras que en el 2010 las ventas de estos medicamentos para tratar la ansiedad alcanzaron los 591.700 envases.
En cuanto a los antidepresivos, el aumento es más notorio. Si en el año 2008 se dispensaron 287.500 antidepresivos, dos años después las ventas llegaron a los 339.000 envases, de acuerdo con las cifras de distribución de la Cooperativa Farmacéutica Leonesa.
En este grupo de medicamentos cabe destacar la salida al mercado de más de un centenar de nuevas referencias, en gran parte debido a los genéricos que están sustituyendo a muchas marcas de laboratorios en las recetas médicas.
En este período, el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos ha ofrecido formación a más de 4.000 farmacéuticos y farmacéuticas para realizar seguimiento farmacoterapéutico a pacientes con trastornos del ánimo.
Según se desprende de los resultados de la campaña realizada con motivo de estos cursos enmarcados dentro del plan estratégico para el desarrollo de Atención Farmacéutica, el 46% de los pacientes incluidos en el servicio de seguimiento farmacoterapéutico mejoraron su salud.
Asimismo, las farmacias detectaron 1980 incidencias debidas a problemas relacionados con los medicamentos (PRM) y 1.579 resultados negativos asociados a la medicación. Uno de cada tres PRM se debieron a la aparición de efectos adversos y un 25% a interacciones con otros tratamientos utilizados por los pacientes.
En un porcentaje inferior, en torno al 9%, el farmacéutico ha identificado dosis, pautas o duración no adecuada, en un siete por ciento problemas de salud insuficientemente tratados. También se detectaron un 7,5% de incumplimientos y un 5,5% de duplicidad o contraindicación.
La principal medida ante estas incidencias fue la derivación al médico. En concreto, en el 63% de los casos de problemas relacionados con los medicamentos psicofármacos los farmacéuticos optaron por remitir al paciente a su especialista a fin de evitar posibles resultados negativos asociados a la medicación.
Con respecto a los Resultados Negativos asociados a la Medicación (RNM), los clasificados como reales son el 61% de los registros y el riesgo de sufrirlos en el 39% de los casos. El farmacéutico ha conseguido identificar y registrar a pacientes con un solo resultado negativo en el 45% de casos; con más de uno en el 20% y en el 35% no ha conseguido detectar ninguno. En más de la mitad de los casos (64,4%) los Resultados Negativos asociados a Medicamentos eran debidos a una inseguridad, mientras que la falta de efectividad del tratamiento era la causa en el 22,4% de las ocasiones.
En los casos de Resultados Negativos asociados a la Medicación, el farmacéutico intervino derivando al médico en el 63,38% de los casos, mediante comunicación verbal en el 80% de estas ocasiones. En el 95,5% de los casos el médico aceptó la información recibida por el farmacéutico para mejorar el tratamiento.