La actividad del volcán islandés Grimsvötn se reduce al mínimo
La actividad del volcán Grimsvötn, que entró en erupción el pasado sábado, se ha reducido al mínimo y sólo expulsa de forma ocasional bocanadas de vapor de agua a la atmósfera, informó ayer el Departamento de Protección Civil islandés. Las autoridades islandesas señalaron que no se había producido nada reseñable la pasada noche en el volcán, aunque alertaron no obstante de que aún podrían ocurrir explosiones en el cráter, por lo que se recomienda no acercarse a menos de dos kilómetros. El Grimsvötn, situado bajo el glaciar Vatnajoekull, ayer no había expulsado ceniza a la atmósfera desde hacía más de 24 horas.
En las horas posteriores al comienzo de la erupción, la nube de ceniza llegó a alcanzar los 20.000 metros, pero se ha ido reduciendo progresivamente hasta el mínimo, si bien los expertos calculan que seguirá desplazándose alrededor del globo hasta después del próximo fin de semana. Científicos del Instituto Meteorológico de Islandia han calificado la erupción como la más poderosa en esta isla del Atlántico Norte desde la del Hekla en 1947.
Durante las primeras 24 horas, el Grimsvötn expulsó más ceniza y más rocas que el Eyjafjalla en 40 días el año pasado. Los análisis realizados por el Instituto de Geociencias de la Universidad de Islandia revelaron que la ceniza del Grimsvötn es más pesada que la del Eyjafjalla.