¿Se crujirán?

Se sabe que el amor es cierto cuando se ponen a volar mariposas en la boca del estómago, pero cuando se amarra el poder no hay mariposas que valgan y lo que se nota es un cosquilleo estimulante y vengativo en los mismísimos testículos... uy, qué peligro.

El amor y el poder, no en este orden, son las obsesiones capitales del hombre, su pasión. Tras ellos pierde el culo y los años con resultados inciertos y siempre insatisfactorios. Algunos llegan incluso a matar por amor y, sobre todo, por ser más que los demás... y mandarles... « en el amor y en el poder sólo se busca el joder », dice un viejo refrán que acaba de inventarse Valdueza.

Las urnas dictaron desamores rojetes... y votos-viagra muy azules y tiesotes (pues date por jodido, se dijeron los otros). Se masca revancha. En la cumbre provincial del pepé , por ejemplo, hay un altar a Júpiter Tonante y se exigen sacrificios de los de correr sangre. Y en el techo caído del cuartel socialista cuelgan las morcillas recibidas ahumándose con las velas que arden en el altar del dios de la raqueta rota. Entre populares hay dos bandos y ahora sólo anda uno con el cirio tieso; los socialistas eran un solo bando... y ahora espadarán dos... u más : « espadarás, María, y tendrás buen lino »... en ello están los bercianos, en el lino y en la estopa.

Hace tiempo, un exdirigente socialista aventuraba esta derrota en la capital señalando que sería la primera vez en la historia que un alcalde perdiera unas elecciones «¡por hacer obras!» (y por no preguntar si fueron necesarios, prioritarios y con ese bulto el obrón de Michaisa que pudo resolverse sin hacerlo, el bosque de pivotes de Ladreda que es un carísimo slalom laberíntico o el coitus interruptus de un tranvía se llevó hasta los deseos). Además, el socialismo comarcal y rústico, que no ha visto al secretario general por sus agrupaciones en todo su mandato, acusa a su cúpula de urbanita y leonesina, de marca ( totus tous) y de orbitar únicamente el ombligo, así que preparan banderillas de fuego o de castigo, que andan los más con cara de higo diciendo «¡porras, ni meto ni ligo!».

Pero no habrá mucho llanto y crujir de dientes en el infierno de las urnas... ni se crujirán.... ¿renovación?... ¿es que existe ahí dentro algún recambio?...