Diario de León
Publicado por
PEDRO TRAPIELLO
León

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El esperado y jaleado último disco de la cantante Bebe, extremeña nacida valenciana, merece nota al margen. Tiene su guantazo en portada; ahí asoma un puño fiero, el suyo, con marchamo de partirte los morros haciendo sangre, mucha sangre, pues muestra en primer plano dos anillacos gordos de mucho metal amenazante... uno es la cabeza de un toro negral con sus cuernos aguzados... y el otro parece una de aquellas mazas medievales que se usaban en los torneos para hacer chatarra una armadura toledana en tres envites...

Al verla, instintivamente uno echa la cara atrás eludiendo el puñetazo que se anuncia, porque ese puño va muy en serio, tiene ganas de hacer daño. Además, lo coloca Bebe junto a la sien y parece algo más que un simple y ruizmateano ¡a que te pego, leche!... así, el que mira advierte a la vez el puño que amenaza, el ojo amenazante y una entreabierta boca amenazando o maldiciendo con un labio perforado por herraje tribal. Cara de desearte buenos días no tiene la nena, no, aunque pretenda suavizar lo impactante de esta imagen con dos pulseritas rosas muy parishilton , lo que faltaba.

La cantante fue canonizada por las ventas hace unos años ante su valentía y compromiso con el No se pega a las mujeres y, después, con el Ahora me toca a mí . Esta vez titula su disco Un pokito de rocanrol . Su promoción es de mucho gasto y floreo, la discográfica sabe que esta chica es un filón. Su calculado look de tía echada palante, como bragada y de pelo en pecho, autosuficiente y cabreada, coincide con este tiempo de furia popular contra el universo de mamones, políticos podridos y debacles generales, representa el ánimo social de la rebeldía juvenil y general que está incendiando conflictos.

No se pega a las mujeres ... pero Bebe está diciendo en esta foto que sí se puede pegar... o que le gustaría infinito hacerlo... ¿a quién, a los hombres?, digo que será algún hombre el objeto del hostión, salvo que esté aquí amenazando a otra tía, que también cabría. Una pena, ¿es sólo una vuelta de tortilla?... ¿ese puñetazo es realmente lo que pensaba con aquel Ahora me toca a mí ?... Pues vaya, para este viaje no necesitaba Bebe tanta alforja... no fotis.

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