CORNADA DE LOBO
Mordiscos
Andén principal, marquesina de visera que lo cubre todo con sus vigas y columnas de hierro, campana más bien pequeña y de repique corto, jefe de estación con palitroque colorao y silbato, vagones de madera con asientos de rejilla que dejan el culo a rayas, locomotora pitando y con chimenea que firma en el aire un doble penacho, el de vapor que se diluye al poco y otro de humarro amarillento que persiste porque es hulla con mucho azufre la que arde en su caldera (en piedrona cruda o en briquetas), carbón de estos nortes, razón por la que nació esta línea férrea León-Bilbao: para llevarse a lo vascongado el tesoro negro de la barriga de estas montañas y la sangre joven de las comarcas que cruza, miles de emigrantes contratados como tuercas en el andamiaje siderúrgico de baracaldos y nerviones... ¡putos maketos!, dijo Sabino... ¡que se jodan!, diría una diputada rubia de bote y tonta del culo... o ¿es tonta del bote y rubia del culo por cagar oro?
La estación de Matallana en León es más francesona que inglesa, pero de las dos tiene aires, o sea, tenía, ahora está severamente desfigurada su estampa ferroviaria y, especialmente, su edificio principal, que muestra un blanco marbellí y amarillo chillón que lo apijota un tanto y nos recuerda vivamente a la bandera vaticana.
Lo que le han hecho a esa estación no tiene perdón de dios. Su conjunto ferroviario de naves, andenes, muelles de facturación, gavilla de vías y topes, depósito de agua, cantinas, muros de cierre y todo aquello, se «modernizó», engulló un pastorro indecente el maqueo y lo asaltaron obras de diseño cultural o tejaditos vegetales hoy secos y feos como ortigales muertos, más todo ese adorneo jardinero y firulí y publicitario y rayante que le impusieron al entorno.
Es curioso, obligan a una feota azucarera a mantener fachada por razones de «arqueología industrial» (sobrecoste intolerable, pero es dinero público) y ¿no lo hicieron en esta estación con el doble de edad y una riqueza industrial y popular nada comparable?... ¿por qué no fueron antes a Inglaterra estos listos y vieron cómo tratan allí a sus viejas y primorosas estaciones?... Yo me lo he tomado como otro mordisco a mi patria infantil... y me escuece la mordida.