¿Corta... fuegos?

Tras el rastro ceniciento y desolado de todo lo que ardió desde Castrocontrigo hasta un lugar llamado Espanto, fue sembrándose a cada paso una pregunta descorazonadora: ¿de qué coños sirvieron los llamados «corta-fuegos»?...

Ese fuego se llevó al infierno el equivalente a ¡quince mil! campos de fútbol, una gigantesca sábana negra que se ve desde la luna sin catalejo, un horror desangelado que se hace puerta de una profecía que engordamos cada año: el desierto merecido.

Imagino el terror de todos esos pueblos. Vieron tan cerca el monte en llamas, que creyeron que les entraría en casa por la puerta del corral. Pero supongo aún peor la terrible condena que ya ha empezado a cumplir toda esa gente a la que han robado su horizonte y su fe: cada vez que abran la ventana para saludar al día, sólo verán monte pelado y petado de estacones negros, calva achicharrada; y así durante unas cuantas e interminables décadas hasta que aquel tupido y familiar cobertor del bosque vuelva a su sitio... ¿qué corazón no se seca o se enfuerece?...

Lo desolador en estos casos es que, además de matarte tu paisaje y tu historia, te dejan a la vista el cadáver para siempre... contagiando muerte.

Lo que se lleva el agua no siempre muere, pero lo que se lleva el fuego sabemos que jamás volverá.

Se piensan estas cosas al contemplar todo lo quemado desde una loma de Nogarejas que baña su faldón en un río Eria escurrido de caudal y algo melancólico en su viejo lecho pedrero. Poca agua. Mucho fuego.

Y preguntas: si el cortafuegos no corta nada en estos casos, ¿a qué ese empeño en seguir macizando las repoblaciones forestales como monocultivos de surco y geometría?... ¿y lo de abrir pistas por las que entran en el monte motores, chispas, negligencias o canallas?... ¿cómo están dañando al monte los recortes de una política necia y manirrota?... si la mayoría de incendiarios quedan impunes porque es facilísimo quemar, ¿por qué cree doña Espe que endureciendo las penas se solucionaría la cosa?, ¿por qué no deja de recortar y evita el fuego del próximo verano mandando trabajar el monte en invierno?...