Muy personal
Aunque Silvia se marchó muy joven de León rumbo a Palma de Mallorca, confiesa que añora su hogar leonés. «Estamos encantados en Berlín, aunque siempre se echa de menos a la familia y amigos y, como no, el olor y el sabor de la tierra».
De la capital germana detesta el tráfico, aunque reconoce que «los germanos son amables y dejan pasar; en esa tesitura son más cordiales que en España». Por supuesto, también recuerda el sol español; «estoy acostumbrada a vivir en una isla». A pesar de todo, esta leonesa considera que no piensa volver, de momento, a España. «Solo de vacaciones, pero no descartamos asentarnos en un futuro».
Silvia no lo duda a la hora de recomendar Berlín. «Si tuviera que dar algún consejo a alguien que quisiera venir, solo diría debe saber el idioma o traer dinero para aprenderlo durante unos meses». Asimismo, también recomienda buscar una vivienda antes, «aquí es muy, muy difícil» y también hacerse a la idea de las bajas temperaturas que se alcanzan en invierno, «de hasta 20 grados bajo cero».
No obstante, para Silvia, la experiencia de marcharse fuera de España es positiva. «Si tuviera que hacer un balance de mi tiempo aquí, lo calificaría con notable alto. Fue la decisión mas dura, pero mejor tomada de toda mi vida».