El Papa aprueba nuevas medidas para combatir el blanqueo

Francisco I reforzó ayer la vigilancia de las operaciones financieras del Vaticano, mediante «motu proprio» (decreto papal) que introduce nuevas medidas contra el blanqueo de capitales y el reciclaje de dinero negro.

Se establece que las leyes aplicadas en el Estado Vaticano se extienden a sus ministerios, organismos e instituciones que dependen de la Santa Sede y a las organizaciones no lucrativas de la Iglesia. Entre las medidas aprobadas se refuerza el papel de la Agencia de Información Financiera. Se creará también un «comité de seguridad financiera» para coordinar las actividades de la Santa Sede.

Las nuevas normas, que entrarán en vigor el 1 de septiembre, se aplican a todos los miembros de la Curia, al personal diplomático y los empleados de organismos y de instituciones vinculadas con la Santa Sede.