Wert quiere que la universidad valore la experiencia laboral de los profesores
La nueva norma divide a los sindicatos entre críticos y los que ven necesaria la reforma.
Hasta ahora, para formar parte del cuerpo docente en las universidades españolas tenía más peso la trayectoria investigadora del aspirante que la profesional. En cambio, el Ministerio de Educación propone en el nuevo borrador del Real Decreto de Acreditación Nacional para el Acceso a los Cuerpos Docentes Universitarios que se tenga más en cuenta la experiencia laboral, con el fin de conseguir una evaluación «más cualitativa que cuantitativa», según asegura el propio Ministerio. El documento, que modifica el último texto aprobado en 2007 por el Gobierno socialista, fue presentado a la Mesa Sectorial de Universidades y ha suscitado la división entre los sindicatos más críticos con la norma y los que tienen posturas más optimistas ante el cambio de rumbo de la universidad. Eso sí, las cuatro formaciones -CC OO, UGT, CSIF y CIG- coinciden en que el anterior real decreto «había que modificarlo».
Así, con el real decreto, que podría entrar en vigor a principios del año que viene, se comenzará a considerar como «dimensión autónoma» la transferencia y la actividad profesional del docente. En el texto se indica que esto es una «necesidad indudable» porque hasta ahora la transferencia quedaba dentro de la investigación y la actividad profesional aparecía asociada a la docencia, lo que conducía a una «infravaloración» de los méritos de actividad profesional en ámbitos «particularmente relevantes».
Sin embargo, los sindicatos no se mostraron conformes. O por lo menos no todos. Mientras que la Confederación Intersindical Galega (CIG) y las federaciones de la Enseñanza de Comisiones Obreras (CC OO) y de la Unión General de Trabajadores (UGT) criticaron el miércoles que la propuesta de reforma del sistema de acceso por acreditación «minusvalora la actividad docente», la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) afirmó que esta reforma otorga un «mayor peso» a la enseñanza.
Así, el presidente del área de Universidad de CSIF, Francisco Olivares, se mostró optimista con la reforma y apuntó que «es mejor que la experiencia docente esté en segundo plano a que sea inexistente». Asimismo señaló que le parece «positivo» que se tenga en cuenta la experiencia profesional de los aspirantes, ya que actualmente «lo que más cuenta es cuántas publicaciones tienes, en lugar de las horas en las aulas» que, en su opinión «es lo más importante para un buen profesor o catedrático». Olivares también alabó la decisión de elevar a más de 20 el número de comisiones de evaluación del profesorado.