Teresa Romero es el único foco posible de contagio
Los expertos descartan que los quince . hospitalizados puedan transmitir el ébola.
La crisis del ébola en España está controlada. El comité de expertos designado por el Gobierno para analizar, estudiar y comprobar que los tratamientos y protocolos se están realizando con todas las garantías explicó ayer que las opciones de que el virus se puede contagiar se reduce a la mínima expresión. Concretamente, a una sola persona: Teresa Romero.
Los médicos han constatado que las quince personas que permanecen ingresadas en el hospital Carlos III por haber estado en contacto con la auxiliar de enfermería están asintomáticos después de permanecer, la mayoría de ellos, entre cinco y siete días de observación.
Esta evolución sin ningún síntoma de la enfermedad (fiebre, diarrea, astenia o mialgia) indica que es muy improbable que cualquiera de ellos pueda desarrollar la enfermedad en los próximos días. «No hay ninguna persona capaz de transmitir el virus del ébola en España salvo Teresa. Es una tranquilidad», afirmó rotundo Fernando Rodríguez Artalejo, catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad Autónoma de Madrid.
Bajo vigilancia
El portavoz oficial de la comisión, al menos ayer y a pesar que otros dos miembros también disertaron sobre la paciente, explicó que los contactos de Romero estarán en vigilancia hasta el 27 de octubre. Si no hay novedad, es decir, si no hay ninguna infección, «estaremos seguros de que este brote ha concluido felizmente». Pero acabar con un brote no es lo mismo que hacerlo con toda la enfermedad. Porque después hay que aplicar el mismo protocolo de 21 días de observación para el equipo que está atendiendo a Romero en la sexta planta del centro madrileño. Un grupo formado por 50 profesionales, todos ellos voluntarios. «Es un gran trabajo de solidaridad. Están realizando un trabajo encomiable porque se sienten observados por todo el mundo», recalcó Rodríguez Artalejo, que anunció también que el hospital Carlos III no ha abierto ningún expediente sancionador al médico que desveló que Romero se había contagiado, con total probabilidad, al desvestirse y tocar un guante de su traje de protección su rostro.
No obstante, Rodríguez Artalejo recalcó que se están siguiendo a rajatabla todos los protocolos de seguridad que manda la OMS y el Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades. Este organismo realizó un informe en el que alertaba sobre la poca preparación del Carlos III para acoger un enfermo de ébola y pedía cambios. Las primeras se realizaron ayer mismo: comenzaron a ampliarse las esclusas.
