La nueva generación de tratamientos de la hepatitis C tiene un éxito del 90%

La hepatitis C ya se puede curar definitivamente. Una nueva generación de medicamentos ha logrado tasas de éxito superiores al 90%. Pero tratar a una persona con ellos cuesta alrededor de 50.000 euros, o el doble si está en una situación grave. El pasado 18 de diciembre, miembros de la Plataforma de Afectados por la Hepatitis C se encerraron en el hospital madrileño 12 de Octubre para reclamar que el Gobierno ponga a disposición de los afectados las nuevas terapias. Ya están aprobados y en otros países de Europa se suministran desde hace meses a miles de pacientes. ¿Por qué aquí no?

¿Cuáles son estos nuevos medicamentos? La nueva generación de medicinas contra la hepatitis C ha logrado varios hitos. El más destacado es su éxito casi total. Algunas combinaciones -el tratamiento siempre supone el uso de dos o más antivirales- ofrecen tasas de curación superiores al 90%. Además, permiten tratar la enfermedad sin usar interferón, una medicación con graves efectos secundarios. Incluso ha abreviado los plazos. Pero 12 semanas de sofosbuvir —comercializado como Sodalvi— cuestan 25.000 euros. Y cualquiera de sus acompañantes más efectivos —simeprevir o dataclavir–, otro tanto. «Y en los casos más graves, que hay que tratarlos durante 24 semanas, el tratamiento asciende a 100.000», explica Bernal. «Menos, aun así, que el coste de una persona afectada toda la vida, que puede llegar a 700.000 euros.

Un problema sobre todo económico. La Asociación Española para el estudio del Hígado denunció el 19 de diciembre que las directrices del Ministerio de Sanidad para suministrar estos nuevos medicamentos eran excesivamente restrictivas y obsoletas. Además, llegaban tarde. Incluso pidió a sus asociados «no seguir las recomendaciones del documento ministerial». El 29 de diciembre el secretario general de Sanidad aseguró que, en 2015, España trataría a entre 5.000 y 7.000 pacientes de hepatitis C con estas terapias. Tras nuevas protestas de los hepatólogos -porque el número de afectados en situación grave es de al menos 30.000- el Ministerio de Sanidad rectificó y aseguró que estos serán los primeros, pero que la cura llegará a muchos más.

«Los responsables últimos, en cualquier caso, son las comunidades autónomas», afirma Antonio Bernal, presidente de la Federación Nacional de Enfermos y Trasplantados Hepáticos (FNETH). «Ellas pagan, así que ellas deciden quién y cómo lo recibirán».

Estalla el debate político. El secretario general del PSOE en Madrid, Tomás Gómez, anunció ayer que se querellarán si el Gobierno no ofrece una solución a «miles de pacientes» antes del viernes. Además, el líder de Podemos, Pablo Iglesias, se reunió con los afectados encerrados en el 12 de Octubre y aseguró que llevará su caso a Bruselas. «Hay mecanismos en la legalidad internacional, europea y en la Constitución, que facultan a un Gobierno para tomar medidas extraordinarias.

Reclamaciones

Nadie quiere tomarlas, pero ante la posibilidad de que mueran ciudadanos de tu país, un Gobierno responsable debe aplicarlas», aseveró. Por su parte, el portavoz adjunto del PP en el Congreso, Rafael Merino, afirmó que el nuevo ministro de Sanidad trabaja «con la máxima celeridad» para dar una respuesta a las reclamaciones de los enfermos de hepatitis C. Explicó que el Ministerio ha negociado con los distintos laboratorios farmacéuticos que proporcionan estos medicamentos para conseguir un precio ajustado y que ahora trabaja con los científicos y especialistas los detalles. «Estoy convencido de que en los próximos días esas personas van a encontrar la solución a través del ministro», dijo.

¿Cuántos pacientes de hepatitis C hay en España? No se sabe cuánta gente padece la enfermedad. Diagnosticadas, explica Bernal, hay menos de 200.000 personas, pero los que no lo saben pueden ser el triple. Durante un tiempo es una enfermedad sin síntomas, pero cuando el virus ataca provoca desde cirrosis hasta cáncer de hígado.