Gente de aquí | Origen religioso concejil
León es el ejemplo
La resolución del Ministerio de Educación para solicitar que la Semana Santa sea Patrimonio Inmaterial destaca las manifestaciones de la provincia.
La Semana Santa de León es todo un ejemplo de la singularidad y de la representatividad de las manifestaciones que se reparten por toda España con motivo de la conmemoración de la Pasión, muerte y resurrección de Jesucristo. Así lo refleja el Boletín Oficial del Estado en la resolución del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte en el que se anuncia que se han iniciado los trámites para solicittar que la Semana Santa española sea declarada Manifestación Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial por la Unesco por su trascendencia internacional.
Tras especificar que además de la Semana Santa urbana también hay un gran número de representaciones rurales, en la resolución se remarca que a pesar de que «es frecuente oír hablar de dos modelos, la Semana Santa andaluza y la castellana, este reduccionismo no representa la realidad», para añadir como ejemplo: «La antigua región leonesa cuenta con una serie de manifestaciones de carácter rural en las que se mantienen tradiciones de origen religioso concejil, con un acervo importante de canciones y representaciones populares simples y antiguas».
En el medio rural
El ministerio destaca que aún compartiendo rasgos esenciales a lo largo de toda la geografía, no existe un modelo único de celebración, «si no que esta manifestación encuentra en el país múltiples variables». Así, en la resolución se hace hincapié en que en el ámbito rural «pervive una mayor cantidad de tradiciones (o de restos de ellas) que en el urbano» y añade que es, precisamente en los pueblos, donde las manifestaciones son más participativas «y es la población en conjunto, y no personas o cofradías individuales, quien lleva a cabo las recreaciones». Así, pone como ejemplo la pasión viviente de Jiménez de Jamuz y entre los vía crucis rurales también resalta el de Santa Cristina de Valmadrigal. En la representación de las tres caídas del Miércoles Santo cita los actos celebrados en Almanza y dentro del «paisaje sonoro» menciona las matacas o carracas «con las que incluso se realiza un concierto en Alija del Infantado». Dentro de los juegos, en la resolución también se hace referencia a las tradicionales chapas, «un juego similar a los de los soldados romanos que se repartieron los bienes de Cristo».
Tres millones de cofrades
Tres millones de cofrades o papones repartidos en diez mil cofradías o hermandades por todo el país. Esta es la cifra que arroja el BOE en el que se especifica que las celebraciones en las ciudades, que eclosionaron principalmente en el siglo XX a pesar de que sus cofradías y pasos fueran anteriores, son una forma de «recuperar las calles por parte de la ciudadanía, al igual que otras manifestaciones como el carnaval (a pesar de sus significados contrapuestos)». Además, añade que en su desarrollo han intervenido tanto el poder religioso como el civil y que en los actos «participan todos los géneros y capas sociales, en muchos casos al margen de la práctica religiosa». La salvaguarda de este patrimonio inmaterial implica también a las autonomías y desde el Gobierno se destaca que la Semana Santa también es música y gastronomía y que cuenta con pasos, imaginería, textiles y objetos relacionados que en muchos casos tiene «un gran valor simbólico y artístico, por lo que forman parte del Patrimonio Histórico español.