España dedica a las becas tres veces menos que la media de los países ricos
La inversión española representa un 0,11% del PIB frente al 0,31% de media de la Ocde.
Estudiantes universitarios, durante una prueba.
De entre los países desarrollados, España es el tercero que menos invierte en ayudas económicas a sus estudiantes universitarios. Aunque los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (Ocde) dedican de media un 0,31% de su PIB a las becas, en España la cifra se queda en un 0,11%. Solo Suiza y Francia aportan, en proporción, algo menos, según el informe El sistema universitario español y su comparación con los sistemas europeos , presentado ayer por la Conferencia de Rectores de las Universidades de España (Crue).
«Los porcentajes de ayudas son bajos, insatisfactorios», aseguró Francisco Michavila, director de la Cátedra Unesco de Gestión y Política Universitaria de la Uned y autor de la monografía. Además, recalcó, la situación no es consecuencia de cómo está organizado el sistema universitario español frente a otros. La falta de inversión en becas es solo una parte de la tímida apuesta general por la educación superior en España en comparación con el resto de países de su entorno. «Hay países donde las matrículas son gratuitas, a coste cero, y con un sistema muy bueno y que sin embargo dedican un 0,69% del PIB a ayudas a estudiantes universitarios», afirmó Michavila en alusión a Dinamarca.
En Alemania, un país donde los estudiantes tampoco pagan tasas anuales por estudiar en la universidad, dedican tres veces más que España —un 0,31% de su PIB— a las ayudas económicas para alumnos de educación superior. Estas becas no son para hacerse cargo de la matrícula, sino para sostener al alumno durante sus años de formación.
Otros casos
El país europeo que más invierte en becas, sin embargo, también es el que cuenta con una mayor presencia de universidades privadas y unas tasas de matrícula más altas. En Reino Unido, que dedica alrededor de un 1% de su PIB a estas ayudas, las matrículas representan casi el 100% del coste real de los estudios. En España, representa no menos del 15% y no más del 25% tras la aprobación del real decreto 14/2012 «de racionalización del gasto público en el ámbito educativo».
Durante la pasada legislatura, España cambió su política de becas. Durante el curso 2013-2014 recibieron ayudas muchos más alumnos, aunque la cuantía media que recibieron se redujo de forma considerable. De 3.256 euros en promedio pasó a 2.562 euros. Hasta entonces, solo a uno de cada diez becados se le compensaba nada más que el coste de la matrícula. Ahora, este caso supone un tercio del total. Según el Ejecutivo, pese a todo, el presupuesto para ayudas —de 1.416 millones de euros previstos para 2016— es el mayor de la historia del país.
El monográfico que se presentó ayer también señala que, aunque España es el país que más estudiantes Erasmus envía y recibe, apenas tiene repercusión como destino académico formal para extranjeros.