Revelan un manuscrito del criminal nazi Eichmann solicitando un indulto
El criminal de guerra nazi Adolf Eichmann solicitó en un manuscrito el indulto del presidente israelí Yitzhak Ben-Zvi dos días antes de morir ejecutado en la horca en 1962, según revela un documento inédito presentado hoy en Israel.
La carta manuscrita original, junto a otros documentos y notas personales del segundo jefe del Estado israelí Ben-Zvi, fueron presentados en un acto celebrado en la sede de la Presidencia de Israel, encabezado por su actual inquilino, Reuvén Rivlin, en coincidencia con el Día Internacional en Recuerdo del Holocausto. La solicitud de indulto de Eichmann fue hecha tras haber sido condenado culpable de quince cargos, entre ellos crímenes contra el pueblo judío, contra la humanidad y de guerra. Adolf Eichmann, político alemán miembro del partido nazi austríaco y teniente coronel de las SS, fue secuestrado por agentes del servicio secreto exterior israelí, el Mossad, en Argentina en 1960 y trasladado a Israel. Tras la celebración de un juicio y dictada la pena capital, fue colgado en la noche entre el 31 de mayo y el 1 de junio de 1962. Se le juzgó como responsable directo del plan conocido como la "solución final", principalmente en Polonia y del transporte de deportados a los campos de concentración alemanes durante la Segunda Guerra Mundial.
En la solicitud de indulto Eichmann afirma: "Los jueces cometieron un error crítico al valorar mi personalidad, porque no pueden ponerse ellos mismos en el momento y situación en la que yo estuve durante los años de la guerra". Al apelar al segundo presidente israelí escribió que "no es cierto que fuera tal figura importante que pudiera supervisar o seguir de forma independiente la persecución de judíos", y arguye que el tribunal ignoró sus alegatos de que "nunca sirvió en una posición elevada que implicara tal autoridad decisiva e independiente". "Nunca di órdenes en mi nombre, sino que siempre actué según las órdenes. En el caso de haber sido, como asumen los jueces, una fuerza fanática conductora en la persecución de judíos, esto se habría reflejado en mi promoción u otros reconocimientos, pero nunca se me concedió ningún beneficio", defendió el criminal nazi. El documento abunda en que "debe trazarse una línea entre los líderes que son los responsables de personas como yo, que nos vimos obligadas a ser herramientas, y el liderazgo. No estuve a cargo de las cosas y por ello no me considero culpable. Y le solicito, honorable presidente, que haga uso de su autoridad para indultarme y ordene que la sentencia de muerte no sea llevada a cabo". Entre los documentos expuestos hoy figura una carta de la mujer de Eichmann, Vera, que solicitó el perdón presidencial "como esposa y madre de cuatro niños", o el de su abogado, Robert Servatius, que destacó en su demanda que su cliente "no era una figura relevante" entre la jerarquía nazi, sino que "se vio empujado por los acontecimientos políticos".
Ben-Zvi rechazó la solicitud y en una carta concisa respondió que "tras estudiar la solicitud de indulto sobre el caso de Adolf Eichmann, y tras haber analizado todos los materiales a mi disposición, he llegado a la conclusión de que no hay justificación para otorgarle el perdón a Eichmann o mitigar el castigo" dictado por los tribunales israelíes. "Por tanto, le informo de que he decidido rechazar la solicitud y no hacer uso de mi autoridad para perdonar o reducir el castigo en este caso", concluye el entonces presidente israelí.