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El desamor se apodera de León

Los divorcios aumentaron un 8% el año pasado en la provincia mientras que. en el resto de España descendieron un 2,4% También crecen las separaciones.

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León

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pablo rioja/agencias | león

Los divorcios aumentaron un 8% en León el año pasado con respecto a 2014. De los 903 casos registrados hace dos años, la cifra se disparó hasta los 976 en 2015, según confirman desde el Consejo General del Poder Judicial. Una tendencia contraria a la media nacional, donde se ejecutaron 123.330 demandas de divorcio, lo que supone un descenso del 2,4%. Asimismo, el número de separaciones —consensuadas y no consensuadas— se elevó de 52 a 71, mientras que tuvo lugar una nulidad matrimonial después de que en todo 2014 no se diese ningún caso. Dentro de la Comunidad Autónoma, la provincia leonesa se sitúa como la segunda que mayor número de divorcios tuvo en 2015, sólo superada por Valladolid, con 1.177 casos.

La pérdida de confianza en la pareja —sobre todo infidelidades y mentiras— la inseguridad, la falta de comunicación, trabajos con horarios incompatibles, la diferencia de sueldos entre hombres y mujeres, así como el mal sexo son, según los expertos, las principales causas por las que casi un millar de matrimonios leoneses pusieron fin a su relación a lo largo de 2015. Por trimestres, el cuarto fue el que más divorcios registró, con un total de 161, seguido del segundo —141—, el primer trimestre —132— y en último lugar el tercero, con 116. Y si los datos arrojados ayer por el CGPJ se comparan con los de 2013, la cifra de divorcios registrados en León se dispara hasta el 10%. Hace tres años se dieron 880 casos en toda la provincia.

Asimismo, según la estadística del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, en el año 2015 se presentaron en la comunidad autónoma un total de 5.035 de demandas de separaciones, divorcios y nulidades matrimoniales, cuando el año anterior fueron 5.447, un descenso de 412.

Los divorcios bajaron de los 5.096 de 2014 a los 4.753 de 2015, con especial descenso de los consensuados, que descendieron un 10%, de los 3.106 de 2014 a los 2.795 del año siguiente.

También descendieron en la comunidad autónoma, en este caso un 1,6%, los divorcios no consensuados, de los 1.990 de 2014 a los 1.958 de 2015. En las separaciones también se produjo un descenso, de las 344 de 2014 a las 275 de 2015, y especialmente entre las consensuadas, que bajaron un 22,6%, de las 257 de 2014 a las 199 del año siguiente.

Las separaciones no consensuadas bajaron un 12,6%, de las 87 de 2015 a las 76 de 2015, mientras que las nulidades matrimoniales se mantuvieron no sufrieron variación y fueron 7, tanto en 2014 como en 2015.

En cuanto al resto del país, el año pasado se presentaron en España 123.330 demandas de divorcio, lo que supone un descenso del 2,4% respecto a las observadas en 2014. En concreto, del total de demandas de divorcio, 73.389 lo fueron de mutuo acuerdo, lo que en términos absolutos suponen 2.406 menos. A su vez, las demandas de divorcio contenciosas ascendieron a 49.941 lo que supone solo 664 menos (un 1,3% inferior) que las no consensuadas que se registraron en 2014. En el caso de las separaciones, sumaron el año pasado un total de 6.595, lo que supone un 6,3 por ciento menos (-446) respecto a las 7.041 contabilizadas en 2014. De ellas, 4.616 fueron consensuadas, con una disminución interanual del 3,9 por ciento, y 1.979 fueron contenciosas, un 11,6 por ciento menos que en 2014.

Nulidades

Por el contrario, el número de demandas de nulidad, 216, fue un 6,9% mayor que el año anterior, en que ascendieron a 202. El aumento fue no obstante inferior al registrado en 2014, cuando las nulidades subieron un 13,5 por ciento respecto a 2013. Sumando las nulidades, las separaciones y las demandas de divorcio, el año 2015, el número de rupturas matrimoniales disminuyó un 2,6% en España respecto a las observadas en 2014.

Poniendo en relación las demandas de disolución matrimonial del total del año, con la población a 1 de enero de 2015, el mayor número de demandas de disolución por cada 1.000 habitantes se registró en Canarias (3,3); seguida de Cataluña y Comunidad Valenciana (3,1); Andalucía, Asturias y Baleares (2,9); y Cantabria y Murcia (2,8). Todas superan o igualan la media nacional que fue de 2,8.

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