Más cannabis y menos alcohol
Proyecto Hombre de León ataca el consumo de marihuana con un programa pionero El 84% de las personas que acuden a la asociación en España son hombres, con empleo y solteros.
dl | redacción
El perfil de las personas con problemas de adicción que acuden a Proyecto Hombre ha variado en los últimos tres años, en los que se aprecia una tendencia descendente del consumo de alcohol (3% menos), al tiempo que aumenta el de cannabis (4% más).
Proyecto Hombre de León ha puesto en marcha un nuvo programa terapéutico para erradicar el consumo de cannabis dirigido a un perfil de usuario más joven que la asociación denomina S-Kapate. El director de la asociación de León, Jorge Juan Peña, define este programa «pionero en España» como un medio para la «prevención y el tratamiento ambulatorio, similar a la lucha contra el tabaquismo».
Que el consumo de cannabis crece es una de las principales conclusiones del informe 2015 del Observatorio Proyecto Hombre presentado ayer, y que pone de manifiesto que el perfil de la persona que acude a esta asociación para tratar sus adicciones es el de un hombre (en el 85% de los casos), de 37 años, con empleo (68,7%) y soltero (60%).
El alcohol (38,9%) y la cocaína (30,8 %) son las sustancias principales por las que estas personas demandan tratamiento —suponen el 69,7% de las admisiones en Proyecto Hombre— y el cannabis es la tercera sustancia (11,4%), mientras que el policonsumo supone el 11,5% y los opiáceos significan una parte muy pequeña (4,2 %). El perfil de los consumidores varía en función de la sustancia.
En cuanto al alcohol, la edad media de inicio en el consumo es de 15 años, la de comienzo del tratamiento los 44, suele ser una persona que convive con su familia y hay un mayor porcentaje de desempleados.
El consumidor de cocaína inicia su adicción a los 20 años y comienza el tratamiento a los 36. En el 39,2% de los casos tienen problemas de pareja, el 48,8 % vive con su familia, son los que más acceden a un empleo (30%) y presentan mayores deudas económicas.
Los 16 años es la edad media de inicio de consumo de cannabis, y los 28 la de comienzo del tratamiento. El 18,8% tienen estudios superiores y suelen ser personas que viven con sus padres, aunque es el perfil con mayores problemas familiares y, al mismo tiempo, los que menos problemas sociales y de salud presentan.
En cuanto a los opiáceos, la edad media de inicio en el consumo son los 25 años y la de tratamiento los 40 y entre ellos se observa un mayor porcentaje de personas sin estudios, que viven solos y tienen más problemas sociales y de salud que el resto.
También se observan algunas diferencias por sexos. Ellos suponen el 85,3% del total de personas que acude a Proyecto Hombre y su media de edad se sitúa en los 37 años. El 61,2 % son solteros frente al 47,1 % de las mujeres.