Escándalo por los sueldazos en la RAI

Hablemos de euros: 650, 370, 320, 280..., pero con un mil después de cada cifra. Estos son los sueldos anuales brutos de los más altos directivos de la televisión publica RAI, que han hecho subir las temperaturas políticas en una península que en estos días ya oscila entre los 35 y 40 grados centígrados.

Estas nóminas están colgados en el portal web de la televisión estatal, gracias a una operación transparencia que el consejero delegado, Antonio Campo Dall’Orto (exvicepresidente de Paramount Channel), ha definido como “hermana de la innovación y de la competencia, una gran oportunidad”. La transparencia afecta a todos los directivos con sueldos superiores a los 200.000 euros anuales. Una ley del gobierno progresista de Matteo Renzi fijó en 240.000 euros el tope máximos de los sueldos estatales, por lo que en la RAI lo han sobrepasado una considerable cantidad de directivos.

Según los datos publicados, Dall'Orto cobra la friolera de 650.000 euros al año. El segundo sueldo estratosférico de la RAI no es precisamente el de la presidenta, Monica Maggioni (recibe 270.000 euros, más otros 66.000 en diversos pluses), sino el de Antonio Marano, quien se embolsa 392.000 euros anuales por dirigir el departamento de publicidad de la televisión estatal italiana. Y a partir de ahí...

También hay profesionales de los que se sabe que cobran cifras quizás superiores, pero de los que no se han filtrado los datos. Es el caso de Bruno Vespa, periodista estrella de la cadena estatal que dirige y presenta el programa con más prestigio e impacto en el mercado auidiovisual italiano, 'Porta a porta'. La dirección de la RAI no ha querido hacer público sus emolumentos, para no dar pistas a la competencia. 

"Muchos directivos de la RAI ganar salarios superiores a los 300.000 euros al año, y muchos otros tienen sueldos de entre 200.000 y 300.000", ha denunciado Carlo Rienzi, presidente de la Codacons ( asociación de protección de los consumidores). "Esto ya de por sí sería suficiente para escandalizar a todo un país, pero hay más - añade Rienzi-. Según informan los medios de comunicación, un gran grupo de periodistas y administradores de la RAI recibe salarios de entre 205.000 y 240.000 euros al año sin ninguna responsabilidad asignada. Es decir, se les paga por no trabajar".

CONVOCADOS POR ANTICORRUPCIÓN

Así, el escándalo, que se ha disparado frente a unos contribuyentes que se consideran vejados, tiene el añadido de esos directivos “cobran por permanecer inactivos”, según acusan los líderes de la oposición, los indignados del Movimiento Cinco Estrellas. “Aparcados y pagados generosamente”, lamentan desde el movimiento formado por Beppe Grillo.

Dall’Orto y Maggioni ya han sido convocados por Raffaele Cantone, Autoridad Nacional contra la Corrupción (ANAC). Este organismo fue instituida por el gobierno para pasar por el rasero la bondad y legalidad los sueldos del Estado y las contratas públicas. De hecho, esta convocatoria es la consecuencia de una denuncia presentada por el sindicato de empleados de la RAI (USIGRAI), hace tres meses.

Maggioni ha puntualizado que se trata de un primer paso para la reforma del ente público, subrayando al mismo tiempo que “ni tan solo un superhéroe puede cambiar la RAI en una noche”. Por otro lado, ha puntualizado que tampoco se pueden reducir drásticamente los sueldos “por el mero hecho de tratarse de un servicio público”, ya que estos “no garantizaría la calidad”. “Nuestros directivos ya están por debajo de los precios de mercado”, ha remachado el consejero delegado.

Hasta la fecha, ningún gobierno ha conseguido reformar la RAI de la manera cómo se lo había propuesto, por lo que la “transparencia” invocada por Campo Dall’Orto constituye una vía nueva.