Perros en la fosa de fusilados
efe | malaga
El Ayuntamiento de Málaga ha cerrado cautelarmente el parque canino situado sobre la mayor fosa de fusilados durante la Guerra Civil, en el cementerio de San Rafael, tras reconocer un error técnico de coordinación entre el consistorio y la Asociación para la Memoria Histórica.
El concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Málaga, Francisco Pomares, afirmó que siempre quisieron «conjugar las actuaciones desde el respeto» y que, por un fallo, la memoria final del proyecto no llegó a su departamento, por lo que se hizo con los planos iniciales menos precisos facilitados por la asociación.
Tras una reunión mantenida esta ayer entre los técnicos del Ayuntamiento y la Asociación para la Memoria Histórica de Málaga, se acordó cerrar temporalmente el parque canino hasta completar las actuaciones pertinentes para cambiar el perímetro y que este no afecte a la fosa número ocho. Pomares reconoció que ha habido «un desfase de datos topográficos» entre los del Ayuntamiento y los de la memoria real, ya que no solo está mal situada en el mapa la fosa 8, con 25 metros de desubicación, sino que «no coincide casi ninguna».
Según Pomares, los planos definitivos no llegaron a los técnicos de urbanismo del Ayuntamiento, que efectuaron el proyecto con los provisionales.