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En las Kalendas de los virus

El brote de bronquiolitis que sufren los lactantes en Salamanca no afecta a León. El jefe de Servicio de Pediatría califica de «razonable» el número de ingresados por esta enfermedad.

El incremento de los casos de gripe llenan este días las salas de urgencias del Hospital y de los centros de salud de León. MARCIANO PÉREZ

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León

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cristina fanjul | león

Un tercio de los niños ingresados en este momento en el ala pediátrica del Hospital de León padece bronquiolitis. En total son diez los lactantes hospitalizados por esta razón y dos más se encuentran en la Unidad de Ciudados Intensivos. El jefe de servicio, Santiago Lapeña, que califica este número de «razonable», destaca que el pico de incidencia suele darse en los meses de diciembre y enero y revela que la dolencia es la causa del ingreso de unos cien lactantes al año. La enfermedad, cuya diana son los menores de dos años, surge como un catarro de las vías altas con tos, fatiga, pitidos al respirar y rechazo en las tomas. Lapeña destaca que se trata de uno de los episodios más complicados para los niños en esa franja de edad y la situación, en ocasiones, puede ser grave. «El problema de la bronquiolitis es que no existe tratamiento alguno que resulte eficaz, por lo que tan sólo podemos emplear medidas de soporte: lavados nasales con suero fisiológico, hidratación y nutrición adecuada, oxígeno (si el paciente está bajo en sangre) y tratamiento con nebulizaciones.

La bronquiolitis es la inflamación aguda de las vías respiratorias pulmonares más finas. Es una infección producida por virus respiratorios, cuyo bacilo más frecuente es el sincitial. En la mayoría de los lactantes diagnosticados están presentes factores de riesgo como haber nacido antes de las 32 semanas de gestación, tener una patología pulmonar o cardíaca previa, acudir a guardería, la presencia de hermanos mayores escolarizados y el tabaquismo en los padres.

Umbral epidémico de la gripe

Por otro lado, en lo que a la gripe se refiere, cabe destacar que su actividad gripal en la comunidad se sitúa por encima del umbral epidémico, con una intensidad baja, cercana a 150 casos por cada 100.000 habitantes. Los virus detectados han sido gripales tipo A, mayoritariamente subtipo H3N2. Además, cabe destacar que la incidencia ha aumentado en todos los grupos de edad excepto en los mayores. Y es que en León se suministraron durante la campaña de vacunación un total de 30.880 dosis, que corresponden a 23.380 de Chiromas y 7.500 de Vaxigrip.

Hay que destacar que la citada campaña se desarrolló, según asegura la gerencia de Atención Primaria, sin ningún tipo de incidencia, a pesar de la advertencia realizada desde el sindicato Satse justo el día antes del comienzo de la vacunación. Entonces, la vicesecretaria del sindicato Satse, Paloma Robles Gallego, subrayaba la posibilidad de que hubiera enfermeros que no vacunaran sin prescripción médica realizada de forma oficial. Lo justificaba en el Real Decreto aprobado en octubre de 2015, según el cual para los medicamentos sujetos a prescripción médica es necesario que el facultativo determine previamente el diagnóstico, la prescripción y el protocolo o guía de práctica clínica y asistencial a seguir por parte del enfermero.

Ayer, este periódico se puso en contacto con el citado sindicato con el fin de contrastar la información aportada desde la Gerencia de Atención Primaria, sin obtener respuesta alguna. En cualquier caso, los plazos de la vacunación se cumplieron según lo previsto y la campaña finalizó el pasado 23 de diciembre.

La onda epidémica de la temporada 2016-2017 se ha iniciado en España en la semana 50, es decir del 12 al 18 de diciembre, seis semanas antes que en la temporada previa.

Es la epidemia que se ha presentado con mayor anticipación desde la pandemia de 2009, periodo en el que las ondas epidémicas gripales comenzaron entre la primera y tercera semana de enero en cuatro temporadas.

Por grupos de edad, se ha observado un incremento en las tasas de incidencia en todos los grupos y es significativo en todos ellos, excepto el de mayores de 64 años.

Defunciones

Desde el inicio de la temporada se han notificado nueve defunciones por virus de la gripe confirmadas por laboratorio, todas ellas asociadas a virus A —cinco A no subtipado y cuatro A(H3N2—. Ocho de los casos eran mayores de 65 años y uno pertenecía al grupo de 45 a 64 años, y todos tenían factores de riesgo. El 22 % había ingresado en la uci. Entre los ocho casos susceptibles de vacunación antigripal, con información disponible, dos (el 25 %) había sido vacunado.

Gripe A y b

En cuanto a los casos graves hospitalizados confirmados de gripe, se han notificado 137 en dieciséis comunidades autónomas y de ellos el 52 % son hombres. En 134 de los pacientes graves (97,8 %) se ha identificado el virus de la gripe A y en tres (2,2 %) el B. Prácticamente todos los virus A subtipados (98 %) son A(H3N2). El mayor número de casos se ha registrado en el grupo de mayores de 64 años (63 %) seguido del grupo de 45 a 64 años (18 %). Todos corresponden a infecciones por virus A excepto un caso confirmado con virus B perteneciente al grupo de cero a cuatro años, uno en el grupo de 15 a 44 años y uno en el de mayores de 64 años.

El 85 % de los pacientes con información disponible presentaban factores de riesgo de complicaciones de gripe.

La pasada temporada se detectaron 25.408 casos de gripe en la comunidad, de los que el 0,9 por ciento fueron graves —la mayor parte en no vacunados—. Uno de cada cuatro pacientes por gripe en la anterior temporada en edad de trabajar, esto es entre quince y 65 años, causó baja laboral por esta enfermedad en Castilla y León, que presenta el segundo mejor dato de vacunaciones por autonomías, con un 22%.