Diario de León

Cuatro semanas para 3.000 padres

El nuevo permiso de paternidad beneficiará en León a 3.000 padres al año. Desde el 1 de enero los progenitores podrán disfrutar de cuatro semanas de baja..

Natalia Gutiérrez y Jaime Carballo, de los primeros hombres que disfrutarán del permiso de paternidad de cuatro semanas. MARCIANO

Natalia Gutiérrez y Jaime Carballo, de los primeros hombres que disfrutarán del permiso de paternidad de cuatro semanas. MARCIANO

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

carmen tapia | león

El nuevo permiso de paternidad de cuatro semanas beneficiará a 3.000 padres leoneses durante este año, tras la entrada en vigor el 1 de enero de la ampliación de la Ley de Igualdad.

Jaime Carballo tiene 40 años y es uno de los primeros leoneses en disfrutar de un permiso aprobado el 21 de octubre de 2016 en el pleno del Congreso con 173 votos a favor, dos en contra y con la abstención del PP y Foro Asturias. El Gobierno ha calculado que la medida tendrá en coste en toda España de 235 millones de euros para poner en marcha un permiso intransferible y no obligatorio.

«Soy el primero en pedirlo y todavía nadie sabe muy bien como hacerlo», explica Carballo, que acaba de ser padre de su segundo hijo. Mateo nació el 1 de enero por cesárea. Su madre, Natalia Gutiérrez, está satisfecha con la nueva medida «porque ahora con la cesárea necesitaré más ayuda, sobre todo teniendo que atender al otro niño también, que tiene tres años».

Aunque aún es pronto para valorar la aceptación de la medida —que es voluntaria— Jaime espera que el Gobierno siga por esta línea y equipare las bajas maternales y la paternales. «En otros países se concilia mucho más», asegura.

España, con sus 16 semanas de permiso para las madres, está por debajo de la media de la UE, que se sitúa en 23 semanas. Una directiva europea indica que los países deben facilitar que la licencia por maternidad sea de al menos 14 semanas, pero no recoge ningún periodo mínimo para el segundo progenitor.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda a los países que establezcan bajas por maternidad iguales o superiores a la seis semanas. La brecha entre la baja maternal y la paternal sigue dificultando hoy en día la conciliación de la vida laboral y familia.

En Dinamarca, la baja tras el nacimiento de un hijo es de un año a repartir entre los padres siempre que la madre coja al menos 126 días y el padre 14 días. En Suecia, la baja es de 480 días compartidos entre el padre y la madre. El padre tiene 60 días de permiso obligatorio más diez días laborables después del nacimiento. Los permisos parentales en 21 países de la OCDE van desde las más de 47 semanas de baja remunerada (en jornadas equivalentes de tiempo completo) de Suecia y Alemania, a ninguna en Australia y Estados Unidos. En Noruega, con 392 días (56 semanas) para la madre al 80 del salario o 322 días (46 semanas) al 100%, el padre tiene derecho a 70 días de ayuda (10 semanas), percibiendo el 100% de su salario. La madre está obligada a tomarse 21 días antes del parto y 42 días después del parto, y el resto puede compartirse con el padre.

A la cola están países como Turquía, Suiza con 112 días para la madre y 3 para el padre), Letonia (112 días para la madre, 10 para el padre), Chipre (sólo 112 días para la madre), Bélgica (105 días la madre y 10 el padre), Eslovenia (84 días para la madre y 11 para el padre) y Liechtenstein (sólo 56 días para la madre).

La obligatoriedad de la baja para los padres es lo que más valoran algunas asociaciones feministas ya que la posibilidad de que los padres puedan elegir acaba convirtiendo en residual la medida, como ocurre con las excedencias para el cuidado de un hijo. La conciliación familiar y laboral es uno de los mayores desafíos políticos. En los últimos diez años las excedencias por cuidado de hijos han aumentado un 10,6%. Por sexos, el porcentaje de madres que hicieron uso de la excedencia bajó del 96,67% en 2005 al 94,01% en 2014, mientras que el de padres subió del 3,33% al 5,99%, según el último informe sobre Empleo y maternidad: obstáculos y desafíos a la conciliación de la vida laboral y familiar, editado por Funcas.

Jaime es mediador de seguros y ya ha comunicado a la empresa que va a cogerse las cuatro semanas de baja que le corresponden por ley. «El servicio jurídico de la empresa me lo está mirando porque como es nuevo me han dicho que no saben si son 28 días ó 30 días. Mi idea es cogerlo todo seguido. Es un cambio muy positivo, aunque no todo lo que debería ser. En otros países se concilia mucho más. Ahora podré estar con ella, ayudarla».

La madre, Natalia Guitérrez, es auxiliar de seguridad. Cuando se acabe la baja de 16 semanas volverá al trabajo. «Después nos esperan las guarderías. Estarán en todos los programas de madrugadores, comedor.. ahora con dos es mucho más trabajo y más dinero. Hay que decirle al presidente del Gobierno que vuelva el cheque bebé».

tracking