«La objeción de conciencia no cabe en la sedación»
Los médicos paliativistas defienden que esta práctica no es eutanasia.
Los médicos responsables, en la presentación. JAVIER ETXZEZARETA.
efe | san sebastián
Los expertos en sedación paliativa —la disminución de la conciencia de un enfermo en los días u horas anteriores a la muerte— advierten de que los médicos están obligados a realizarla cuando esté indicada y además autorizada por el paciente, con lo que no tiene cabida la objeción de conciencia.
Este es el mensaje que los médicos especializados en el área de cuidados paliativos han querido transmitir a los profesionales de Atención Primaria que celebran en San Sebastián el XXIV Congreso Nacional de Medicina General y de Familia.
Y lo han hecho a través del doctor Jacinto Bátiz, jefe de Cuidados Paliativos del Hospital San Juan de Dios de Santurce (Vizcaya) y responsable del grupo de trabajo de Bioética de la Semg. Bátiz es consciente de que en este campo hay confusión y que «muchos médicos no han querido sedar porque sus ideas no se lo permitían pues pensaban que era como hacer una eutanasia». Por eso, los paliativistas han querido hacer docencia en este foro y ante la sociedad para dejar claro que, si se dan los condicionantes necesarios para aplicar la sedación, «se está haciendo una buena práctica medica, no está provocando la muerte». ¿Y por qué se confunde sedación paliativa con eutanasia?. Bátiz responde: «Porque a veces la sedación, en algunos casos, se emplea con intención de acabar con la vida del enfermo. Eso hay que tratar de evitarlo». La sedación paliativa en sí es «un tratamiento neutro», según Bátiz, pero se puede convertir en bueno o malo depende de la intención con que se emplee. Por ejemplo, tal y como ha argumentado el experto, con un cuchillo podemos cortar jamón y estaremos haciendo un buen empleo del cuchillo, pero si apuñalamos a alguien haremos una mala labor. «Los ciudadanos no tienen que pensar —continúa— que porque les ingresen en la unidad de cuidados paliativos, si les van a sedar, le van a hacer la eutanasia. Y tampoco deben tener la tentación de pedirnos a los médicos que les sedemos porque lo que quieren es acabar ya con su vida».