RETRATOS CALLEJEROS MARÍA DEL CARMEN PÉREZ artesana
El embrujo del esmalte grabado a fuego
carmen Tapia | texto
secundino pérez | fotografía
Una joya que embruja. El esmalte a fuego, una técnica utilizada por los persas mil años antes del nacimiento de Cristo, sobrevive en León gracias a la apuesta de apenas media docena de artesanos que mantienen viva una ciencia que lucha por perdurar. En las ferias, pocas, es habitual encontrar a la leonesa María del Carmen Pérez. «Empecé en 2008 y ahora voy a las ferias de artesanía». Cada pieza es una obra de arte, una joya cuyo valor sólo valoran los conocedores de un proceso minucioso y artesanal que eleva a la categoría de arte cada creación que sale del fuego. «Son joyas, únicas. Nunca hay dos iguales». Visitar la casa de María del Carmen es entrar en un museo que no se rige por las modas. «En León somos muy pocos los que dominamos esta técnica», explica con palabras como fundentes, contraesmaltes y dibujos a pluma. Son tan pocos, que en León no encuentra los materiales que necesita para sus composiciones. «Aquí no hay ningún sitio donde se venda el material y lo compro en Madrid, Barcelona o Asturias». En una pequeña torre ganada a la casa acumula frascos de esmaltes de colores, platas, cobres, horno, pinceles...y ahora una lupa para dibujar motivos cada vez más minuciosos, algunos copiados de obras del Museo de Arte Moderno de Ámsterdam.