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El Muro que se convierte en obra de arte
Las planchas de hormigón que separaron Berlín sirven hoy para proyectos artísticos.
Trabajadores indonesios colocan cuatro partes del muro de Berlín. BAGUS INDAHONO
daniel garcía | redacción
El muro que durante casi tres décadas separó a amigos y familiares tiene ahora muchos y diversos fines, todos ellos por todo el mundo. Las partes que separaban a la ciudad de Berlín ahora recorren el mundo cortadas en planchas para tener un fin muy distinto para el que en un principio fueron ideadas.
El Gobierno indonesio expondrá cuatro planchas del Muro de Berlín pintadas por el artista indonesio Teguh Ostenrik, dentro del proyecto artístico Una escultura que rome el límite, en el parque Kalijodo de la capital de Indonesia, Yakarta.
Este ha sido el último destino de cuatro de las planchas que formaban los 155 kilómetros de muro. Desde 1989 varias han sido las ciudades que han sido destino de las partes del denominado Muro de la vergüenza.
En la ciudad de Los Ángeles, en la obra The Wall Project, ocho planchas del muro sirvieron en 2009 de lienzo para artistas como el francés Thierry Noir y el estadounidense Kent Twitchell. Su obra se puede apreciar desde entonces en la avenida Wilshire, partiendo la avenida en dos y emulando así la división de Alemania.
Instituciones de la importancia del Parlamento Europeo de Bruselas, o la sede de las Naciones Unidas en Nueva York tienen su particular pieza de este puzzle.
Aunque el lugar más curioso para encontrar una plancha del muro no es ni Los Ángeles ni Bruselas, si no en Las Vegas. Exactamente en el Main Street Casino, en el baño de hombres, detrás de los urinarios.
En España, el madrileño parque Berlín, situado en el distrito de Chamartín, muestra tres trozos que se encuentran en medio de una fuente, que todavía conservan las pintadas originales de 1989.