Diario de León
Publicado por
Liturgia dominical Jesús Miguel Martín Ortega
León

Creado:

Actualizado:

L a palabra «duermevela» el DRAE la define como sueño ligero en que se halla el que está dormitando o, también, sueño fatigoso y frecuentemente interrumpido. Así podríamos describir la vida en nuestra cultura occidental, tantas veces superficial, extrovertida, que huye de la realidad con la misma facilidad que se sitúa en lo virtual. Creemos estar despiertos, pero vivimos dormidos, ignorantes de lo que realmente importa.

En este domingo nos hacemos eco de una invitación del Señor que suena más fuerte y significativa que nunca: «¡Velad!» Necesitamos salir de la somnolencia imperante. Hay que estar despiertos, porque están por acontecer cosas decisivas: estamos alumbrando, con no pocos dolores, un tiempo nuevo. Hay un hecho que marca una auténtica novedad por cuanto es capaz de renovar todas las cosas: el «advenimiento» del Señor, que los cristianos llamamos «Adviento» y que, como transformación radical del corazón, tiene una relevancia y una magnitud sin precedentes.

Si viene el Señor, aún cabe la esperanza; dejará de estar todo al arbitrio de los poderosos y sus intereses; la justicia será justicia y lo contrario nunca se llamará «derechos». Si viene el Señor, lo que no cuenta comenzará a contar y lo más pequeño y despreciable será tenido por lo más valioso, porque los que ahora cuentan se las arreglan por sí mismos. Si viene el Señor, las cosas no quedarán como están, y ya no tendremos que fiarnos de los cambios que prometen los que no necesitan que nada cambie. Si viene el Señor, a muchísimos se nos llenará el corazón de alegría, aunque nos machaquen con la publicidad de que eso no es posible sin el aparato de ultimísima generación.

«Ojalá rasgases el cielo y bajases» decía el profeta Isaías siglos antes de la venida del Señor. Millones de personas lo gritan en nuestros días. Que sus gritos nos despierten de nuestros letargos. Despertemos, estemos en vela para vivirlo. Si no, el duermevela matará nuestra última esperanza.

tracking